Con visa humanitaria, joven cubana llega a Miami para una operación en el cerebro

Por la falta de tecnología médica en Cuba, la joven Kareilys Castillo ha arribado a Estados Unidos gracias a una visa humanitaria para atenderse una malformación que afecta su cerebro y le impide caminar con normalidad.

Telemundo 51 reportó que a la adolescente y a su familia les sorprendió el diagnóstico del padecimiento llamado Malformación de Arnold Chiari, pero lo peor para todos fue escuchar que en Cuba no había forma de llevar a cabo una operación para tratar el mismo.

“Me sentí muy mal, con la sensación de perder a mi hija. No encontré otra salida”, dijo su madre, Alicia García, a la cadena de noticias.

Unos tíos de la familia lograron tramitar el documento humanitario en menos de un mes, con la ayuda del hospital de la Universidad de Miami.

La operación es sumamente importante porque, de no realizarse, se podrían agravar los síntomas de Kareilys, lo que provocaría que no pueda caminar nunca más y quede parapléjica.

La joven comentó que debe avanzar con cuidado cuando sale a la calle, porque en cualquier momento puede perder el equilibrio y caer al suelo.

Kareilys tiene programada su operación para este diciembre, mes en el que cumple sus 15 años, y para ello necesita de ayuda económica para cubrir 60 mil dólares en gastos hospitalarios.

“Con que me dieran un peso, estaría enormemente agradecida porque sería un peso que no tenía”, comentó la joven que está siendo atendida por médicos de la División de Neurocirugía del hospital de dicha casa de estudios, a través de UHealth International.

Para apoyar a Kareilys se puede hacer aportaciones en la plataforma Gofundme, donde se indica que ya se reunieron cerca de 6 mil dólares.

Arnold Chiari es un trastorno grave que afecta la parte inferior del cerebro que causa muchos síntomas como pérdida de la visión, falta de equilibrio y carencia de fuerza muscular. También se experimenta pérdida de conciencia y dolores extremos de cabeza.

Este caso es muy similar al del niño cubano Jhan Lucas, quien, acompañado de su padre, llegó a territorio estadounidense con visa humanitaria para la extirpación de un tumor cerebral, operación que no se puede hacer en Cuba por falta de equipo médico.

Tras la intervención quirúrgica, el pequeño ha demostrado una recuperación favorable e incluso ya está dando sus primeros pasos.