Condenan a cubanos en EEUU por robo de respiradores para pacientes con COVID-19

Yoelvis Denis Hernández (42 años) y Luis Urra Montero (25 años) cometieron el robo el 9 de agosto de 2020. (Collage: Justicia de EEUU)

La jueza federal de distrito en el sur de la Florida, Marcia G. Cooke, condenó a 41 meses de cárcel (más de tres años) a dos ciudadanos cubanos que fueron declarados culpables por el robo de 192 ventiladores mecánicos que el gobierno de Estados Unidos enviaría a El Salvador para paliar la crisis de COVID-19.

El referido hurto de los equipos, que están valorados en tres millones de dólares, fue cometido por Yoelvis Denis Hernández (42 años) y Luis Urra Montero (25 años) el 9 de agosto de 2020, según consta en los registros y pruebas documentales aportadas por la fiscalía.

Ambos robaron la carga al asaltar un camión con remolque, pero la policía encontró la mayoría de los ventiladores esa misma jornada, pues los ladrones situaron el cargamento en un lote a la espera de poder ir trasladando los equipos para su venta individual.

Urra Montero fue arrestado el 15 de septiembre de 2020 y no le fue concedido en ningún momento el derecho a fianza por existir la posibilidad de fuga.

Por su parte, Hernández fue capturado en mayo del 2021 a pesar de que tanto el FBI como la Agencia de los EEUU para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), propietaria de los ventiladores, ofrecieron una recompensa de 10 mil dólares por información que diera con su paradero.

Un ventilador mecánico o respirador es una máquina, de accionamiento eléctrico —controlado mediante microprocesador— electromagnético o neumático, que suple la ventilación pulmonar espontánea por una ventilación mecánica en personas con una insuficiencia respiratoria, ya sea aguda o crónica. El gas de respiración suele estar enriquecido con oxígeno.

Durante la crisis de COVID-19, el uso de estos dispositivos sufrió una gran demanda pues las unidades habitualmente disponibles comenzaron a escasear con la ola de enfermos necesitados de atención especializada que saturaban los hospitales.

Los ventiladores se utilizan principalmente con pacientes enfermos en unidades de cuidados intensivos hospitalarias, aunque también pueden ser portátiles —ambulancias y urgencias— y domésticos —para su uso en domicilios—.