Congresistas de EEUU conmemoran el segundo aniversario de las protestas masivas en Cuba

Congresistas y exiliados cubanos se reunieron en el Museo de Brigada 2506 en Hialeah Gardens. (Captura de pantalla: América Tevé – YouTube)

La Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso de Estados Unidos llevó a cabo una significativa sesión ayer lunes en el Museo de la Brigada 2506 en Hialeah Gardens, Miami. En el evento, se honró al pueblo cubano por el segundo aniversario de las protestas masivas ocurridas el 11 de julio de 2021, además de alertarse sobre el peligro del régimen castrista para la seguridad nacional del país norteño.

Encabezada por el presidente de ese organismo legislativo, Michael McCaul, la sesión fue escenario para reconocer a las decenas de miles de cubanos que salieron a las calles hace dos años en una valiente demanda de libertad.

Durante su intervención, el republicano también enfatizó la preocupación por la alianza entre Cuba y naciones como Rusia, China e Irán. La posibilidad de una base militar y de espionaje del país asiático en suelo cubano ha despertado inquietudes y la necesidad de abordar esta situación de manera urgente.

En ese mismo contexto, el congresista Mario Díaz-Balart, presidente del Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes, anunció su intención de aumentar la ayuda destinada a promover los derechos humanos en Cuba, esperando incrementarla a 30 millones de dólares.

Además, Díaz-Balart expresó su compromiso de bloquear cualquier tipo de ayuda a países que respalden la explotación de los médicos cubanos, en una clara muestra de solidaridad con el pueblo de la Isla.

La representante del Distrito 27 de Miami, María Elvira Salazar, recordó con emoción cómo el pueblo cubano salió masivamente a las calles de las diferentes provincias, unidos en una sola voz que exigía libertad, respeto a los derechos fundamentales y un sistema democrático.

Asimismo, la republicana reiteró la importancia de apoyar a los cubanos que continúan luchando por sus ideales en la actualidad, y corren el riesgo de terminar detenidos y sufrir torturas en las cárceles del régimen.

La congresista demócrata Debbie Wasserman Schultz, presente en el evento, resaltó que, independientemente de las diferencias políticas entre demócratas y republicanos, la libertad de Cuba es un tema innegociable. Manifestó la necesidad de mantener la unidad en el Congreso para enfrentar los desafíos que el régimen cubano impone a la seguridad y la estabilidad en la región.

La sesión contó con la participación de miembros de la histórica Brigada 2506, quienes lucharon por la libertad de Cuba en la invasión de Bahía de Cochinos en 1961, así como representantes del exilio cubano en el sur de Florida.