Consejo de Estado lanza convocatoria para elecciones nacionales en marzo de 2023

El Consejo de Estado es el órgano que la representa entre uno y otro período de sesiones a la ANPP. (Foto: Periódico Cubano)

El Consejo de Estado lanzó la convocatoria oficial para celebrar en marzo de 2023 las próximas elecciones nacionales en Cuba, de conformidad con la Ley No. 127 Ley Electoral, luego de que se celebraran los comicios municipales que registraron el mayor rechazo popular en la historia.

De acuerdo con la escueta nota publicada en el portal web del Parlamento cubano, las elecciones para elegir por el término de cinco años a los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) se efectuarán el 26 de marzo de 2023.

#Cuba🇨🇺 | Convoca el Consejo de Estado a elecciones nacionales#PoderPopular https://t.co/pVEl8lIR67

— Asamblea Nacional Cuba (@AsambleaCuba) December 1, 2022

El trámite se hará de conformidad con lo establecido en la Constitución de la República y en la Ley No. 127 Ley Electoral, de 13 de julio de 2019.

La responsabilidad de organizar los comicios recaerá en el Consejo Electoral Nacional, dominado por el Partido Comunista de Cuba (PCC). Este ente, una vez culminadas las elecciones, informará públicamente los resultados.

La ANPP es el órgano supremo del poder del Estado y supuestamente “representa a todo el pueblo y expresa su voluntad soberana, según el artículo 102 de la Constitución de la República”. En total está conformado por 605 diputados, que en la actual legislatura tienen un promedio de edad de 49 años, con predominio de mujeres al superar el 53% del total.

Es de esperar que el sistema de propaganda oficialista acentúe la campaña para incentivar la participación popular en las elecciones de marzo de 2023, luego de los pésimos resultados del domingo 27 de noviembre, cuando la actual gestión de Miguel Díaz-Canel recibió un voto de castigo en las urnas.

Por primera vez en la historia del comunismo cubano, desde que se realizan farsas electorales en 1976, la abstención superó el 30%.  Aun con datos manipulados, solo el 68.58% del electorado participó en las votaciones.

Sin embargo, si se suman la abstención con las boletas en blanco de los que sí asistieron a las urnas, un 5.22%, además de las papeletas anuladas tras efectuarle alguna marca indebida, un 5.67%, el rechazo a las elecciones fue del 42% de los más de ocho millones de electores convocados.

El resultado final demuestra que la legitimidad de antaño que el régimen comunista exhibía ya es insostenible hasta en los números oficiales, siempre maquillados.

Ninguna de las conquistas enaltecidas por la “revolución” como la salud o la educación tienen los resultados de lustros pasados. En los hospitales no hay médicos ni recursos para atender a los enfermos y en las escuelas los padres de los alumnos deben encargarse hasta de conseguir la base material de estudio. El presente curso inició sin la totalidad de los uniformes para los estudiantes.

El alto costo de la vida con una inflación galopante, la escasez de alimentos y los continuos apagones hacen que la vida en la Isla sea una continua lucha por sobrevivir. Los cubanos no tienen tiempo para pensar en farsas electorales que nada resuelven.