ESTADOS UNIDOS
Crean museo en Hialeah para conmemorar a veteranos de Bahía de Cochinos
El museo Assault Brigade 2506 – mismo nombre del equipo a cargo de la “invasion” – fue creado para honrar a este intento de derrocar a Fidel Castro
Para poder honrar al grupo de exiliados cubanos que participaron en la misión militar de Bahía de Cochinos fue creado el nuevo Assault Brigade 2506 Museum, que está dedicado al proyecto para derrocar a Fidel Castro organizado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
Los sucesos ocurrieron en 1961, cuando el gobierno de Estados Unidos había intentado organizar una invasión en Cuba con el objetivo de obtener el apoyo y reconocimiento internacional de órganos como la OEA y demás países del mundo.
Los detalles de la misión, así como los hechos ocurridos una vez que los integrantes de la brigada llegaron al territorio cubano, han permanecido ocultos al público, pero con la creación de este museo se espera brindar claridad sobre este importante hecho histórico.
Muchos de los integrantes cubanos que participaron en la misión han fallecido o alcanzado la tercera edad, por lo que los sobrevivientes se encuentran muy emocionados de poder dar testimonio de los hechos y contribuir al museo con su conocimiento.
“En este momento somos viejos. La mayoría de nosotros estamos en los años 80. Estamos muriendo uno por día, pero la historia debe ser preservada”, expresó Esteban Bovo, uno de los pilotos que participó en el ataque.
De acuerdo a Félix Rodríguez, uno de los sobrevivientes de la misión, “todos los que fueron reclutados pensaron que era un rico cubano que estaba promoviendo y financiando esta operación para derrocar a Fidel Castro y llevar la democracia a nuestra patria”, pero tras pasar unos días de entrenamiento, se dieron cuenta que se trataba del departamento de inteligencia de Norteamérica.
En aquel momento Félix, junto a sus compañeros, fue trasladado a una locación desconocida para empezar su entrenamiento. “Nos pusieron en un avión de campo. Ni siquiera sabíamos a dónde íbamos. Las ventanas del avión en C54 estaban pintadas de negro”.
Muchos sospecharon que era el gobierno de EE.UU el que organizaba la misión. Aunque nunca se les dio una confirmación oficial, el tipo de armas y vehículos que les fueron proporcionados, solo podían ser de parte del Estado.
“¿Dónde más puedes conseguir las armas, los tanques y todo lo de B26? Tenía la sensación de que los estadounidenses estaban detrás de esto”, señaló Bovo.
Los esfuerzos fueron en vano, pero lo que lamentan más, fue el desinterés de parte del gobierno norteamericano. Cuando la milicia de Castro logró repeler los intentos de invasión, el presidente, John F. Kennedy desistió del plan y dejó a muchos de los reclutados a merced del régimen, pese a los planes de rescate que había prometido.
Con la creación del museo en Hialeah, nombrado en honor a la brigada, los veteranos sobrevivientes esperan que este pedazo de historia no sea olvidado por las futuras generaciones.