El gobierno de Cuba sigue endeudando a las próximas generaciones de cubanos. Al no tener efectivo, compra con créditos chinos todo lo necesario para la economía nacional. En esta ocasión, se ha gastado 34 millones de dólares en un dique flotante para la reparación de buques en alta mar.

El barco está equipado con la más moderna tecnología y será capaz de dar asistencia y mantenimiento a embarcaciones que no superen las 65 mil toneladas de peso, según informaron medios de prensa estatales que cubrieron la llegada del barco fabricado en China.

La obra de ingeniería llegó a puerto habanero tras una recorrido de 52 días por los mares Índico y Atlántico y el Mar Caribe, luego de 18 meses de construcción por parte de la empresa China National Machinery Import and Export Corporation en Shanghai.

La televisión cubana cubrió la llegada del dique que posee dimensiones descomunales de 240 metros de largo y 48 de manga total, y su adquisición está pensada en atender a buques del tipo Panamax.

China es el segundo socio comercial de Cuba, las cifras del 2018 así lo demuestran con un intercambio comercial que alcanzó los 2.000 millones de dólares, buena parte de ellos favorables al país asiático que vende más de lo compra.