Cubanos atrincherados en Islas Caimán: uno abandonó el barco y el bebé tiene fiebre

Los cubanos que permanecen atrincherados a bordo de un barco en Islas Caimán comienzan a resentir la falta de aire y agua potable, por lo que uno de ellos abandonó el barco y se conoce que el bebé de una de las migrantes presenta fiebre.

La nave permanece anclada en el puerto de George Town, donde el grupo se niega a abrir la cabina, mientras oficiales de Aduana y Control de Fronteras (CBC por sus siglas en inglés), esperan en cubierta y embarcaciones que los rodean.

De acuerdo con el informe de The Cayman Compass, al menos uno de los tripulantes abandonó la nave la tarde de este miércoles, y fue trasladado por las autoridades del puerto hacia la orilla.

El cubano, quien fue captado descendiendo de la nave portando un chaleco salvavidas,  afirmó que no se sentía bien, por lo que se le montó en un vehículo en espera de recibir atención médica.

Al lugar arribaron cajas con insumos para quienes permanecen a bordo, luego de que los migrantes pidieran ayuda mediante transmisiones de Facebook, en las que afirmaron estarse quedando sin agua y comida.

La bebé de 10 meses, hija de los migrantes Javier Jouz Varona y su esposa Erica Álvarez-Freites, presenta fiebre, según confirmó la madre.

Álvarez-Freites habló con el citado medio la mañana de este jueves, y reafirmó su negativa a bajar del barco o a dejar que el bebé reciba atención médica en un hospital de Islas Caimán.

“Si voy al hospital, me van a quitar a mi hija. No queremos volver (a Islas Caimán). Ellos quieren forzarnos a volver”, dijo en la entrevista por teléfono.

Si la bebé se mantiene con fiebre por demasiado tiempo podría ser peligroso para su salud, o incluso fatal, podría desarrollar meningitis o sufrir una deshidratación severa.

Álvarez-Freites afirma que, aunque el grupo fue provisto con agua y comida este miércoles, el agua se les está acabando otra vez.

Ella culpa a las autoridades de los problemas de salud de su hija, por las condiciones que enfrentan en el barco, entre el encierro, la falta de aire, el calor extremo y la poca agua.

“Nos estamos sofocando en esta habitación sin aire, por eso mi hija está enferma. No pertenecemos a Islas Caimán, no queremos volver ahí”, expresó la mujer.

Los cubanos, que habían sido reportados como desaparecidos el pasado 4 de abril, se encuentran en el barco desde este martes, negándose a descender porque serían llevados por el personal de Migración, pero reclamando que son ellos quienes no los dejan bajar del barco ni irse del puerto, refiriéndose a que no los dejan circular libremente.

Álvarez-Freitas y su esposo Javier Jouz Varona compartieron varios videos en redes sociales, denunciando la situación y pidiendo ayuda, pero muchos fueron eliminados la mañana de este jueves.

Mientras tanto, unos 10 adultos y el bebé permanecen en la embarcación, con elementos de la CBC esperando afuera y tratando de convencerlos de bajar, todavía sin éxito.