Cubanos ofrecen la ayuda que el gobierno niega a los más necesitados

En las redes sociales los cubanos ayudan a los más necesitados (Foto: grupo de Facebook Dar es Recibir)

Miles de cubanos se han sumado a grupos o a iniciativas en las redes sociales con el objetivo de ofrecer la ayuda que el gobierno niega a los más necesitados.

Donaciones de ropa, juguetes, comida, dinero e intercambios de medicamentos son comunes, gracias a la solidaridad de un pueblo que es capaz de quitarse lo poco que tiene para apoyar al otro.

El humorista Limay Blanco y su proyecto, son un hermoso ejemplo de cómo se pueden cambiar vidas mediante la bondad aún y cuando existan trabas, carencias.

Igualmente, en Facebook, la red social más empleada por quienes viven en la Isla, podemos encontrar innumerables grupos abiertos o privados, en los que se colocan evidencias de las ayudas a familias en situaciones precarias y a personas enfermas.

En su muro de esta red social, el grupo ‘Dar es Recibir’ dice que “fue creado para ayudar a las personas de bajos recursos y discapacitadas. Según recibo y entrego donaciones lo muestro con pruebas, las cuales me sirvan de Confianza y Seguridad”.

A este pertenecen cerca de cuatro mil personas del oriente del país fundamentalmente, cifra que sigue en aumento motivado por las acciones de un joven nombrado Rosell Saavedra.

«Dar es Recibir»  ofrece la ayuda que el gobierno no da

Cubanos ofrecen la ayuda que el gobierno no da(Foto: Grupo de Facebook Dar es recibir)

En una de las tantas publicaciones, el administrador del grupo en Facebook comenta que “cada día recibo y dono gracias a todos los que me apoyan, que Dios los bendiga mucho y les multiplique todo en salud y éxitos…”

“En el camino me he encontrado con todo tipo de personas: buenas y malas, agradecidas y desagradecidas, muchas dan las gracias y tantas otras que nunca las dieron, interesadas, oportunistas, egoístas…” señala  el joven holguinero.

Además, dice que visita «seguidamente algunos casos en específicos y ni siquiera han dicho «siéntate». Muchos me dicen: adelante, ¿qué deseas tomar café, agua? Me dan merienda o almuerzo, comparten lo poco que tienen y cuando me ven por ahí me dicen: gracias Rosell.»

Más que sus palabras, sus fotos y videos muestran la labor desinteresada que realiza gracias a miles que no dudan en comentar y ofrecer su contribución.

Muchos comentan las publicaciones del grupo de ayuda (Foto: collage grupo de Facebook Dar es Recibir)

Recorrer esta y otras páginas donde se muestran casos de miseria extrema, de enfermos sin medicamentos o niños sin un juguete puede llegar a estrujar el corazón.

Sobre todo porque son el reflejo de la Cuba verdadera y no de esa, que venden las revistas o los guías de turismo.

Asimismo, conocer que aún queda un ápice de humanidad, de amor y deseos sinceros de compartir entre tantas necesidades, también indica que no todo está perdido.