Daniel Llorente, “el hombre de la bandera”, intentó entrar a Estados Unidos

Daniel Llorente protestó con una bandera de EEUU en Cuba (Foto: Periódico Cubano)

El opositor Daniel Llorente, conocido como “el hombre de la bandera”, intentó entrar a Estados Unidos junto con su hijo, pero los devolvieron a México por los agentes migratorios, informó el Diario de Cuba.

Llorente declaró al medio independiente que en el Puente Internacional de Laredo les dijeron que por el momento el acceso está cerrado para personas con visas de turistas y también para solicitantes de asilo por motivo de la pandemia.

El activista y su hijo, Eliezer Llorente, quienes realizaron una larga travesía para llegar a México, comentaron que recibieron buen trato por dichos agentes y posteriormente regresaron a la Casa del Migrante AMAR que por el momento da refugio y alimento a más de 40 indocumentados.

Por ser víctimas de la represión comunista, ambos tienen la esperanza de que la administración de Joe Biden les va a otorgar el asilo para poder vivir en EEUU.

“Actualmente no tenemos patria, fuimos expulsados de Cuba por luchar por la libertad del pueblo cubano, compadézcase de nuestra situación y bríndenos un suelo donde poder vivir y poder seguir luchando contra la dictadura cubana”, manifestó a dicho portal.

En 2018, Llorente interrumpió el desfile del Primer de Mayo al correr en la Plaza de la Revolución con una bandera estadounidense. Por este hecho estuvo detenido en la cárcel 100 y Aldabó donde fue torturado y luego lo encerraron en el Hospital Psiquiátrico de La Habana.

Tras ser liberado, agentes de la Seguridad del Estado lo volvieron a detener y lo subieron a la fuerza a un avión camino a Guyana con 100 CUC, además llevaba una biblia y la constitución de EEUU.

El activista estuvo trabajando como cargador de bultos para tener ingresos en dicho país caribeño y en 2020 se reencontró con su hijo en Guyana luego de que el joven huyó de Cuba por ser víctima de la represión.

La pandemia dificultó la vida de ambos en Guyana y por ello decidieron hacer el viaje hacia EEUU con 8.000 dólares en los bolsillos.

Tras cruzar territorio brasileño entraron a Venezuela con ayuda de traficantes de personas que cobraron 550 dólares a cada uno, pero fueron detenidos en Caracas al no tener papeles migratorios.

Al ser liberados se encaminaron a Colombia donde pagaron 400 dólares a otros traficantes para llegar a Capurganá y ahí desembolsaron otros 300 para un viaje en lancha hasta Panamá.

Daniel y Eliezer tardaron una semana en cruzar Centroamérica y a atravesar el territorio mexicano para llegar a la frontera donde estarán residiendo con la esperanza de conseguir el asilo.