«Decepcionante», así describe una tiktoker al restaurante de Bad Bunny

Una tiktoker ha hecho fuertes declaraciones sobre Gekko, el restaurante del cantante puertorriqueño Bad Bunny, asegurando que la experiencia fue una gran decepción.

Identificada como Ellie Gil, la influencer refirió en su cuenta en la red social, que asistió al local en compañía de un grupo de amigos, movidos por la gran publicidad que ha recibido el lugar tras su apertura el pasado mes de agosto.

“No soy ajena a los restaurantes de lujo, pero tampoco soy idiota”, refirió la internauta en un clip que compartió a través de la popular plataforma.

Así mismo, enumera una lista de cosas que, en su opinión, la dejaron a ella y a sus amigos con un amargo sabor de boca, por lo que no solo se fueron bien molestos, sino que invita al resto de sus seguidores a no ir allí.

Una de las cosas que más le disgustó a Gil, fue el hecho de que la “bebida estaba muy dulce y la comida estaba muy grasosa”. De igual forma, les aconseja a su más de 35 mil suscriptores en TikTok que “cuiden su dinero”, pues el sitio no vale la pena, ya que “la atención fue grosera y lenta”.

“Y ni siquiera mencioné la parte en la que esperamos dos horas para que nos sentaran (aún con reserva) y trataron de separar a nuestro grupo y sentarnos en lados separados de la barra”, reveló la influencer.

 Por su parte, varios usuarios aseguran que esta no es la primera vez que leen o escuchan malas reseñas sobre el famoso local.  “Solo he visto críticas negativas”, fue el comentario de una usuaria al clip.

El pasado 11 de agosto, Gekko abría sus puertas en la ciudad de Miami, donde se reunieron algunas de las mayores celebridades de la ciudad, como Karol G, Lele Pons, el cantante Joe Jonas, Dj Khaled, las actrices Chantel Jeffries, Shopie Turner, el rapero Lil Wayne y la familia Beckham.

Aunque el negocio es una cooperación de Benito con el empresario David Grutman, es la figura del Conejito Malo quien más clientes atrae al glamuroso restaurante, cuyo nombre significa “luz de luna” y que se especializa en comida japonesa, donde la decoración también recuerda esa cultura oriental con vaporosas cortinas teñidas con oro y terciopelo.

El menú engarza lo tradicional nipón con una fusión de platos más modernos, en una singular apuesta con la carne de Wagyu, que es preparada como una barbacoa. Incluye una amplia variedad de arroz y sushi, además de bebidas tradicionales del país asiático.

Los precios oscilan entre los 14 a los 120 dólares, aunque algunos platillos más exclusivos pueden rebasar ese precio.

El restaurante, con capacidad para 185 comensales, “transporta a sus visitantes a un íntimo y raro mundo nocturno”, según refiere la página web del propio local.