Depone huelga de hambre Jorge Pérez, condenado a un año de prisión por vínculo con Clandestinos

Busto de Martí manchado de rojo como señal de protesta del grupo cubano “Clandestinos”.(Clandestinos Facebook).

El prisionero político Jorge Ernesto Pérez García, quien fue condenado a un año de prisión tras ser vinculado con el grupo opositor Clandestinos, abandonó la huelga de hambre que mantenía desde el pasado 18 de marzo.

Pérez García se encontraba protestando de esa forma para exigir su libertad, pero la depuso este miércoles, a seis días de haber iniciado.

Según Diario de Cuba, fue la madre del joven, Mercedes García González, quien dio a conocer el fin de la huelga de hambre de su hijo.

“Él no tiene condiciones de salud para realizar una huelga de hambre. Decidió hacerla porque se considera totalmente inocente y en el juicio el fiscal no le pudo probar nada. El abogado defensor en cinco ocasiones pidió una fianza para que pudiera esperar en libertad la fecha del juicio y siempre fue denegada”, explicó García González.

La madre del preso fue una de las pocas personas que asistió al juicio, celebrado en diciembre pasado bajo fuertes medidas de seguridad.

García González indicó que lo único que vincula a su hijo con los actos vandálicos de Clandestinos, es un supuesto envío de fotos y videos de las estatuas manchadas.

Según la mujer, “sin conocer la relevancia de los sucesos, prestó su teléfono de mejor calidad a su primo, Panter Rodríguez, para que los vídeos e imágenes fueran enviados a EEUU. Ni siquiera fue en su teléfono donde esos vídeos e imágenes se hicieron, pero tampoco esa supuesta transferencia de información el fiscal pudo demostrarla en el juicio”.

Como en muchos casos contra disidentes, las autoridades han intentado ponerle nuevos cargos al joven, como tráfico de drogas, algo que su madre considera “una gran injusticia”.

El fiscal ha pedido seis años de condena para Pérez García, pero el Tribunal impuso al final solo un año, por un supuesto delito de “difamación de las instituciones y organizaciones de los héroes y mártires de carácter continuado”.

En esta sentencia se le exoneró del delito de “daños a bienes del patrimonio cultural”, pues quedó demostrado que Pérez García participó en absoluto en el vertido de sangre sobre bustos de José Martí y vallas con propaganda política, las principales acciones de Clandestinos.

Sin embargo, la Fiscalía no quedó conforme con la condena a Pérez García, y apeló el fallo del Tribunal Municipal de Plaza de la Revolución, por lo que se encuentra a la espera de una respuesta.

El de Pérez García es el caso menos severo de los de aquellos vinculados con Clandestinos. Su primo, Panter Rodríguez Baró y Yoel Prieto Tamayo, fueron condenados a 15 y 9 años de privación de la libertad, respectivamente, por el mismo cargo de Jorge, además de “daños a bienes del patrimonio cultural”.

Ambos están a la espera de juicio por supuesto tráfico de drogas, lo que aumentaría sus condenas, ya de por sí excesivas, pues en sus casos tampoco hay pruebas de que hayan manchado los bustos y vallas comunistas.

En el caso de Rodríguez Baró, el abogado defensor presentó una apelación de esa condena al Tribunal y se encuentra a la espera de respuesta.