EEUU: De “Cero Tolerancia” a cuidados de infantes y centros de salud para inmigrantes

Ha pasado un año desde que el presidente de los EEUU declarara la política de “Cero Tolerancia” como medida para contrarrestar el flujo migratorio hacia su país, pero al paso del tiempo se ha modificado ante el creciente flujo de familias inmigrantes que se aglutinan en las fronteras que dividen el país de las barras y las estrellas con México.

Ante la creciente llegada de familias migrantes, las autoridades fronterizas norteamericanas han dejado de realizar sus labores de vigilancia y deportación porque se han dedicado a cuidar la salud de los niños que llegan con sus papás y que permanecen en los que eran centros de detención y que ahora se han convertido en centros de salud.

Ross Wilkin, portavoz de la Patrulla Fronteriza mencionó que han estado “gastando mucho tiempo, esfuerzos y dinero para cuidar a las familias” detallando que en cuánto al presupuesto reservado para la dependencia federal está “por las nubes“.

Durante los días más duros de la implementación de la política de “Cero Tolerancia” que ordenó la administración de Donald Trump, los jueces sentenciaban a decenas de personas para su deportación, pero actualmente han sido pocas las personas que asisten a las audiencias, ya que las autoridades fronterizas han perdido el control ya que se han dedicado más que nada al cuidado de las personas.

La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza realizó 8.998 casos para procesos penales a lo largo de la frontera con México en febrero de este año, lo que representó un 12% menos de los 10.252 registrados en enero del mismo año y también representó una caída del 23% de los 11.652 en octubre del 2018, de acuerdo con la Transactional Records Access Clearinghouse de la Universidad de Siracusa.

Mientras que las remisiones a las autoridades federales han disminuido en 35% en el distrito sur de California de octubre a febrero, y un 34% en el distrito sur de Texas se está a la espera de las medidas que dictamine la administración federal norteamericana después de haber declarado “Estado de Emergencia” ante la oleada cada vez mayor de familias inmigrantes que quieren llegar a los EEUU para poder encontrar un mejor futuro.

Con información de Sun Sentinel