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El activista cubano Raúl Soublett y su suegra cumplen 72 horas varados en Panamá
El gobierno de Daniel Ortega no les da permiso de ingresar a Nicaragua
El activista cubano Raúl Soublett y su suegra, Damayí Valdés Cocho, se encuentran varados en Panamá. (Foto: Raúl Soublett – Facebook)
El activista Raúl Soublett y su suegra, Damayí Valdés Cocho, continúan varados en el Aeropuerto Internacional de Tocumen, en Panamá, debido a que el gobierno de Daniel Ortega les ha prohibido la entrada a Nicaragua.
El periodista independiente exiliado, Héctor Luis Valdés Cocho, comentó vía Twitter que su pareja y madre se encuentran bien, aunque se les nota un cansancio en la voz.
Asimismo, indicó que las autoridades panameñas les permiten tener acceso a sus teléfonos celulares, pero solo una vez al día.
Luego de 72 horas varados en el aeropuerto de Tocumen, Panamá tras Nicaragua negarles la entrada, hoy pude saber de mi mamá y mi pareja el activista @RaulSoublett. Están bien a pesar del cansancio que se les nota en la voz. Aún no pueden acceder a sus móviles, solo 1 vez al día. pic.twitter.com/HEjqRaaByV
— Héctor Luis Valdés Cocho (@HectorValdes_91) September 25, 2022
Tras amenazas y acoso por parte de la Seguridad del Estado, Raúl y Damayí abandonaron la Isla con la intención de reunirse con Héctor Luis en Estados Unidos. Ambos aprovecharon el libre visado para cubanos en Nicaragua, a fin de ingresar a Centroamérica, pero la complicidad de Ortega con el castrismo, les impide la entrada a este país.
“Cuando nos disponíamos a abordar el vuelo hacia Nicaragua, el lector de los pasajes no aceptó los nuestros y de inmediato nos llevaron las autoridades migratorias”, explicó el activista al un medio independiente.
Si Panamá decide deportarlos, el opositor podría ser detenido momentos después de ingresar a la Isla, a causa de un video que le obligaron a filmar cuando dio por finalizado su proyecto Alianza Afrocubana y se confirmaron sus intenciones de irse del país.
La policía política obligó a Soublett a decir que dicha iniciativa, dirigida por él desde 2017, recibía fondos procedentes del extranjero.
«Me dijeron que si regreso al país usarán el video, que bajo coacción filmé, para encarcelarme por el origen de los fondos», comentó el defensor de los derechos de las personas afrodescendientes y de la comunidad LGTBI en Cuba.
El reformado código penal cubano establece, en su artículo 143, que un residente de la Isla puede recibir una sentencia de cuatro a 10 años de privación de la libertad si recibe fondos desde el exterior.
La actual situación de Raúl y Damayí, también la vivió el periodista independiente cuando abandonó su país con su colega Esteban Rodríguez. Ellos se quedaron varados en El Salvador, donde obtuvieron el permiso de permanecer ante la negativa de entrada a Nicaragua, pero luego se movilizaron de forma ilegal hacia EEUU.
Este escenario se repitió con el científico cubano Oscar Casanella, cuando en diciembre de 2021 se fue de la Isla con su esposa embarazada y a ambos también les bloquearon el acceso al país bajo la dictadura orteguista.
