El Covid-19, la policía y la mosca: Todos los detalles del debate entre Harris y Pence

El primer y único debate de los candidatos a la vicepresidencia de los Estados Unidos tuvo lugar el miércoles en la Universidad de Utah, en Salt Lake City.

En comparación con el anterior encuentro entre el mandatario republicano Donald Trump y su rival, el demócrata Joe Biden, el “cara a cara” de Kamala Harris y Mike Pence transcurrió de un modo más civilizado, pero no por ello, menos exento de polémica.

Coronavirus

Los primeros minutos del debate estuvieron dedicados a la crisis sanitaria desatada por el coronavirus y en donde los aspirantes mostraron las grandes diferencias que les alejan. Harris, por su parte, afirmó que si los especialistas recomiendan vacunarse contra la pandemia lo haría sin dudar, pero no, si lo pide Trump.

“Si el doctor Fauci —principal epidemiólogo de la Casa Blanca—, si los médicos nos dicen que debemos ponérnosla, seré la primera en la cola, absolutamente. Si Donald Trump nos dice que debemos ponérnosla, no lo haré”, subrayó la senadora.

Mientras tanto, Pence defendió su asistencia a un evento desarrollado hace casi dos semanas en la Rosaleda de la Casa Blanca y donde, pudo haber sido el foco de los contagios entre personal y el propio mandatario. La residencia presidencial se ha convertido en un foco de Covid-19.

En los últimos días ha habido casi una especie de “goteo” de casos que han incluido a la portavoz Kayleigh McEnany, los senadores Mike Lee y Thom Tillis, la exasesora Kellyanne Conway, entre otros.

“Mi esposa Karen y yo estuvimos allí, y estuvimos honrados por estar allí. Mucha gente de quienes estuvieron en el acto, Susan —moderadora—, en realidad muchos se hicieron las pruebas de coronavirus, y fue un acto al aire libre, lo que todos nuestros científicos aconsejan habitualmente y rutinariamente”, señaló.

Racismo

Con respecto a las reciente oleada de protestas a lo largo y ancho de Estados Unidos por la muerte de varios ciudadanos afrodescendientes a manos de policías, Pence calificó de “insulto” que los demócratas, y en especial Joe Biden, digan que las fuerza de la ley son implícitamente parciales contra las minorías.

“No voy a sentarme aquí para ser sermoneada por el vicepresidente sobre lo que significa aplicar las leyes de nuestro país”, contestó Harris, quien en su momento fuera fiscal general del estado de California.

Uno de los golpes más bajos atestados por Pence fue cuando aseguró que, bajo la administración de Barack Obama (2009-2017), de la que Biden fue vicepresidente, se permitió la expansión del grupo terrorista Estado Islámico (EI). Asimismo, indicó que los padres de Kayla Mueller, una joven estadounidense asesinada por los yihadistas en Siria en 2015, piensan que estaría viva si Trump hubiera estado a cargo cuando fue secuestrada.

No obstante, el verdadero “protagonista” del encuentro fue una mosca que permaneció pegada a la cabeza del vicepresidente durante dos minutos y tres segundos. La mancha oscura sobre el cabello blanco de Pence hipnotizó a los estadounidenses e hizo que se desatara una avalancha de comentarios y memes en Twitter.

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— Joe Biden (@JoeBiden) October 8, 2020