El desarrollo de la Orquesta Sinfónica Nacional a 60 años de su nacimiento

La Orquesta Sinfónica Nacional de Cuba ha estado presente en muchas ocasiones desde su creación en 1959, después de la Revolución. La revitalización y fortalecimiento ha sido un componente clave del movimiento, lo que ahora está inspirando a los músicos e intérpretes de la Orquesta Filarmónica de La Habana a tomar un lugar sin precedentes en la historia de la música cubana.

A pesar de los retos artísticos y económicos que enfrentan, la orquesta ha logrado ganar terreno y ha sido reconocida por su excelencia técnica e interpretativa. Sin embargo, todavía enfrentan muchas carencias, como la falta de fondos y atención por parte de las autoridades y responsables, lo que ha llevado a la disminución de conciertos pedagógicos y la falta de reparación del teatro Auditorium Amadeo Roldán, su sede.

La institución musical sigue grabando discos y recibe a invitados y solistas tanto locales como extranjeros. Aunque se ha ganado un público selecto y conocedor, es importante que se preste más atención a la presencia musical en otros circuitos y se promueva la cultura a nivel nacional.

A través de una mejor coordinación de los mecanismos necesarios, incluyendo el respaldo económico, se podría potencializar el desempeño de la Orquesta Filarmónica, que ha sido un punto culminante del sinfonismo cubano durante varios años. En general, se debe trabajar en el sentido humanista y social de la cultura para satisfacer el gusto diverso del público.