El enigma de la “Luz al final del túnel” antes de morir

Los científicos británicos Neil Dagnall y Ken Drinkwater han realizado varios estudios a partir de teorías e hipótesis existentes sobre las vivencias de personas que se han encontrado de una manera muy cercana a la muerte.

Sensaciones como la de una luz blanca brillante al final de un largo túnel, poder ver o conversar con familiares perdidos o mascotas queridas; son las que muchas personas que han estado cerca de morir experimentaron, y que según lo expresado por Dagnall y Drinkwater en un artículo publicado en The Conversation, la ciencia puede ser capaz de dar explicación a estos eventos pese a la apariencia sobrenatural que tienen.

Sobre las experiencias cercanas a la muerte, los científicos afirman que son «un acontecimiento psicológico profundo con elementos místicos», explicando que esta condición puede deberse a por situaciones de muy fuerte dolor físico o emocional, pero que también es posible que ocurran  luego de ataques cardíacos o lesiones cerebrales traumáticas e incluso mientras se practica la meditación.

Los científicos británicos, afirman en su estudio que un tercio de las personas que han atravesado este tipo de experiencias, expresan haber experimentado sensaciones como sentimientos de satisfacción, desprendimiento psíquico del cuerpo, traslados rápidos por un largo y oscuro túnel hasta alcanzar una luz brillante.

Por otro lado, la edad, el aspecto cultural y religioso pueden ser determinantes en las vivencias experimentadas, ejemplo de ello casos como el de los indios que aseguren haberse reunido con Iama, el dios hindú de la muerte; el caso de personas de origen estadounidense que dicen que se encontraron con Jesús; o el caso de los niños que mayormente suelen decir que se han encontrado con amigos y maestros.

Los neurocientíficos Olaf Blanke y Sebastian Dieguez, en el año 2009 proponen la existencia de  dos tipos de experiencias cercanas a la muerte, en donde una está asociada a casos en los que el hemisferio derecho del cerebro esté afectado y provoque una sensación alterada del tiempo y tener la sensación de volar; y el otro tipo se asocia con daños en el hemisferio izquierdo y que se caracteriza por las sensaciones de poder ver o comunicarse con espíritus y escuchar voces o sonidos.

Por su parte, la condición de los lóbulos temporales también puede interferir en estas experiencias, dado que esta zona del cerebro involucra el procesamiento de la información sensorial y la memoria; razón por la que alguna falla en su funcionamiento puede producir alteraciones en las sensaciones y percepciones.

Existen muchísimas teorías que ayudan a definir este tipo de sensaciones asociadas a encuentros cercanos a la muerte, sin embargo Dagnall y Drinkwater consideran que precisar un por qué, una razón para estos sucesos, es realmente difícil siendo las más destacadas la explicación religiosa (que las asocia a la vida después de la muerte) y la científica (que señala la aparente despersonalización o simple sensación de separación respecto al cuerpo).

Otra hipótesis relaciona la sensación túnel como un revivir de la experiencia de atravesar el canal del parto, según Carl Sagan; mientras que otros a la firman que esto se debe falta de oxígeno en el cerebro, desencadenando convulsiones y posiblemente alucinaciones.

Ante las muchas las teorías existentes, en los últimos tiempos sobresale la del “cerebro moribundo”, que explica que al producirse la muerte celular aparezcan alucinaciones; sin embargo aún no quedan completamente explicadas la gran variedad sensaciones extracorpóreas en los encuentros cercanos a la muerte.

Con Información de ActualidadRT