Gobierno cubano sigue atrasado en los pagos del préstamo para las obras del Mariel

Desde el pasado mes de julio el Gobierno cubano ha retrasado el pago de 17,3 millones de dólares al Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil, como pagos mensuales relacionados con el financiamiento subsidiado recibido por la Isla para las obras de modernización del puerto de Mariel, anunció la Revista Veja.

Los fondos del proyecto fueron aportados por el mencionado banco estatal con la aprobación del Gobierno de Brasil de aquel entonces, para los trabajos realizados por el controvertido contratista Marcelo Odebrecht, implicado en el escándalo de corrupción que lo llevó a la cárcel.

El gigante sudamericano ha financiado alrededor de 880 millones de dólares en exportaciones de 33 empresas brasileñas a Cuba desde 1998.

Hoy La Habana tiene un saldo adeudado al BNDES de alrededor de unos 597 millones de dólares.

Sin embargo, de acuerdo con los medios antes mencionados, desde mayo pasado, el gobierno cubano decidió dividir y posponer el pago de sus cuotas mensuales al BNDES. El banco estatal ha afirmado que esta decisión no se negoció con su junta directiva, aunque sí se cumplió.

A pesar de la actual demora en el pago de 17,3 millones correspondiente a las cuotas de los últimos tres meses, BNDES aún no considera que La Habana incumpla el contrato.

Los intereses y las demoras están aumentando a la deuda total y, en consecuencia, a las cuotas mensuales vencidas.

Debido a esta evaluación del BNDES, el FGE (Fondo de Garantía de Exportaciones) aún no se ha ejecutado, algo que podría pasar si transcurren más de 180 días en la demora de los pagos. Según BNDES, Cuba ha estado mostrando demoras específicas en sus pagos durante los 20 años de financiamiento.

El Gobierno de la Isla retrasó en mayo pasado el pago de la parte de 6,6 millones de dólares y el débito se pagó en dos plazos, en junio y julio, con retrasos de 50 y 60 días, respectivamente.

Del total de 880 millones de dólares financiados por el gobierno brasileño en Cuba, el BNDES ya le fue pagado alrededor de 490 millones de dólares en pagos, incluidos capital e intereses.

Al BNDES no poder financiar directamente a otros países, los mecanismos utilizados por el gobierno del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva para beneficiar a su aliado y a la empresa Odebrecht -elegida para hacerse cargo de las obras de Mariel- fueron el financiamiento de las exportaciones brasileñas de maquinaria, equipos, suministros, mano de obra y servicios para ese proyecto.

El BNDES asignó 2.230 millones de reales para la modernización del Puerto de Mariel. La primera fase de la modernización del puerto se inauguró a principios de 2014, en una ceremonia presidida por los expresidentes Raúl Castro y Dilma Rousseff y es considerada por expertos como una prioridad para el régimen cubano.

El Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU) realizó una auditoría judicial, concluyó, hace poco más de tres meses, que los gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff hicieron una excesiva reducción de intereses sobre los préstamos otorgados a Cuba para las obras de construcción del puerto de Mariel.

La misma entidad también decretó que los descuentos de 68 millones de dólares, en concepto de interés, eran ilegales en cuatro préstamos otorgados por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) para el proyecto cubano.

Los datos emergieron porque el alto tribunal brasileño investiga todos los desembolsos realizados por el mencionado banco para favorecer obras que fueron ejecutadas por compañías acusadas de corrupción, como la constructora Odebrecht, que ha estado involucrada en un escándalo internacional por los pagos de sobornos que hizo para ser beneficiada con contratos en diferentes países de la región de América Latina.

Con información de Diario de Cuba