El módulo de alimentos para niños en Cuba consiste solo en galletas

El módulo de alimentos para niños en Cuba consiste solo en galletas (GRECHENT ALFONSO TORRES/FACEBOOK).

Enojo e indignación causaron entre los cubanos los módulos de alimentos ofertados por el régimen de Cuba para niños de 0 a 13 años, que los surte únicamente con galletas dulces.

En redes sociales, la activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) Grechent Alfonso Torres, denunció lo que el gobierno en Santiago de Cuba está vendiendo módulos “para niños”.

En la fotografía se aprecia solo una bolsa con algunas galletas, un sorbeto y una Africana, todos dulces sin valor nutricional alguno.

“Mientras los gobernantes y sus familiares de este país viven su dulce vida sin salir de sus casas y comiendo lo que desean a costa del cubano de a pie, nuestros hijos se tienen que conformar con lo que el gobierno Cubano nos vende”, escribió la cubana en su publicación.

El módulo de alimentos para niños en Cuba consiste solo en galletas (GRECHENT ALFONSO TORRES/FACEBOOK).

Y es que aunque podría parecer que el paquete es “especial” para los niños por contener precisamente cosas dulces, en realidad es promocionado por el régimen para “nutrir” a los menores de 13 años.

Alfonso Torres denuncia que en lugar de leche u otro alimento necesario para los niños, reciban solo comida chatarra y en tan escueta cantidad.

Escasez y COVID-19 en Cuba

En medio de la crisis provocada por el coronavirus, que ha acentuado la escasez en Cuba al incrementar el racionamiento, los módulos deberían servir de ayuda para agilizar las compras de los cubanos y garantizarles lo que necesitan.

Y es que las colas kilométricas para adquirir alimentos son un escenario común en todas las provincias de la Isla, pero la situación se ha vuelto preocupante con la pandemia de COVID-19.

La exposición, no solo al exterior, sino a la cercanía con cientos de personas a la vez en las colas para adquirir productos básicos podría resultar en más casos, en especial porque el agua y el jabón, esenciales para combatir al virus, también escasean en la Isla.

Ante el temor de que el desabasto se incremente en los próximos meses, como efecto de la pandemia, el régimen ha aumentado el racionamiento, pero eso a su vez obliga a los cubanos a salir con más frecuencia.

Aunque se intentó instalar tiendas virtuales en la capital para disminuir las colas, la escasez de alimentos y otros productos las hace irrelevantes, pues quienes las usan no pueden surtirse de lo que necesitan.

Es por eso que aun con el riesgo de contagio de COVID-19, los cubanos prefieren seguir exponiéndose en inmensas colas por horas, con la esperanza de que eso les garantice alcanzar lo que están buscando.