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Empresa estatal vende banderitas cubanas para el 1.º de mayo
“No deje de ir al desfile del Primero de Mayo sin su bandera cubana, usted si vive en la capital la puede comprar en la UEB Habana ubicada frente al Hotel Blusón”
La venta de las banderas ha generado una ola de reacciones en las redes sociales. (Foto © Periódico Cubano)
En un absoluto acto de desfachatez y cinismo, la empresa estatal Propaganda y Eventos publicó en redes sociales la venta de banderitas cubanas de papel para el desfile por el 1.º de Mayo, un evento clave en el calendario de la propaganda del Partido Comunista de Cuba (PCC).
“No deje de ir al desfile del Primero de Mayo sin su bandera cubana, usted si vive en la capital la puede comprar en la UEB Habana ubicada frente al Hotel Blusón en Plaza de la Revolución o contacte al teléfono 59934210 ahí tendrás más información”, dice la publicación que está enfocada tanto para personas naturales como para empresas.
Sin dar detalles del precio de la banderita de papel, la entidad Propaganda y Eventos advierte a los posibles compradores que hay todas las facilidades de pago. Por ejemplo, aceptan efectivo, transferencias bancarias, y pagos por Transfermóvil y Enzona.
La venta de las banderas ha generado una ola de reacciones en las redes sociales, donde los cubanos se han mostrado críticos y escépticos acerca de la necesidad de comprar un símbolo nacional para poder participar en un evento que muchos consideran obligatorio.
La empresa estatal ofrece variedad de opciones para el pago. (Foto © Propaganda y Eventos – Facebook)
En las plataformas, se han producido intercambios irónicos y sarcásticos. José Eduardo Díaz bromeó sobre el uso de los ingresos obtenidos por la venta de banderas para la construcción de infraestructuras, como termoeléctricas.
Algunos se han mostrado resignados, otros más indignados, pero la sensación general es que este tipo de iniciativas se suman a una larga lista de decisiones que no benefician a la mayoría de los cubanos.
Muchos de los participantes en el debate mencionan que, en lugar de gastar dinero en banderas, sería más provechoso destinar esos recursos a resolver los problemas económicos del país, como el desabastecimiento de productos básicos y la inflación creciente.
La venta de estos productos no es la primera controversia relacionada con el uso de símbolos nacionales en Cuba. Anteriormente, los cubanos ya habían criticado la comercialización de camisetas y otros productos con motivos patrióticos, cuyo origen y calidad a menudo son cuestionados por los consumidores.
La implicación de Alexis Castro, hijo del fallecido líder Fidel Castro, en estos negocios, ha sido un tema recurrente en diversas investigaciones sobre corrupción y falta de transparencia en los contratos relacionados con la producción de estos artículos.
En un extenso artículo publicado por Juan Juan Almeida en 2017 en Martí Noticias se exponen los hilos detrás del lucrativo negocio de abastecer todos los actos públicos del castrismo con elementos de propaganda como banderas, pullovers, gorras y carteles.
