En Cienfuegos no hay medicinas para curar la sarna y otros padecimientos

Se agudiza la falta de medicinas en la Isla (Foto: Periódico Cubano)

“Medicinas para los niños. No más mentiras”, decía el cartel con el que protestó una madre de Cienfuegos al no encontrar medicamentos para curar la sarna que afecta a ella y a sus dos hijos.

Midaisy Marrero Gil relató ante Radio Televisión Martí que realizó la manifestación pacífica frente una farmacia de dicha provincia luego de que no encontró en ella los antialérgicos y antiescabióticos recetados por un médico.

Ella y sus hijos se contagiaron de dicha enfermedad cuando fueron ingresados en el Centro Especializado Ambulatorio por dar positivo a COVID-19 en la localidad de Aguada de Pasajeros.

“Hay un gran brote de escabiosis. Mi bebé de 2 añitos es alérgico, somos convalecientes de la COVID-19 y ni siquiera tenemos duralginas para los dolores de cabeza”, manifestó Marrero Gil.

Por la protesta, la madre estuvo detenida varias horas, recibió una multa de 30 pesos y una fuerte advertencia de la Seguridad del Estado.

La madre lamentó ante la emisora que las farmacias estén sin medicamentos y además no haya en la localidad ingredientes para hacer remedios alternativos o tradicionales.

“No hay remedios para nada, ni para los menores que son alérgicos, que tienen tarjetones, o las personas con afecciones del corazón, diabetes o hipertensión”, manifestó la progenitora.

Marrero Gil comentó que es una “misión imposible” en la Isla conseguir fármacos para personas enfermas con males cardiacos y psiquiátricos, entre otras enfermedades; además tampoco hay manera de conseguir vitaminas, pastillas prenatales, antibióticos y condones.

“Hace poco perdí a un hermano que era esquizofrénico. No teníamos con qué controlar sus crisis. Cada vez que lo llevábamos al médico le ponían una inyección diferente. Hasta que cayó en una enfermedad llamada ‘síndrome neuroléptico maligno’ debido a la variedad de antipsicóticos”, agregó.

Marrero Gil comentó que su hermano estaba en el Hospital Provincial Gustavo Aldereguía y el día que lo desconectaron también se enteró de que se aplicó lo mismo a otras personas con respiradores artificiales porque no había recursos para mantenerlos con vida en este centro de salud.

La madre lamentó que el gobierno siga culpando al bloqueo estadounidense por la falta de medicinas cuando las tiendas de moneda libremente convertible están surtidas de fármacos.

Ante la escasez de medicamentos, los cubanos en muchas ocasiones dependen de las donaciones del exterior o entre ellos mismo crean redes de intercambio para conseguir analgésicos o antibióticos.

Hace unos días se informó que la cubana Mabel Cuesta, profesora de la Universidad de Houston, empezó a enviar a diferentes provincias bolsas llenas de medicinas.