Familiares de Tahimí Alvariño catalogan su comercial de la merienda escolar como “humillante”

La actriz desató la polémica al promocionar productos que los cubanos hace meses que no ven. (Captura de pantalla © Anucio de Katapulk – YouTube)

La actriz cubana Tahimí Alvariño ha sido duramente criticada por algunos miembros de su familia, al participar en una publicidad en redes sociales de Katapulk, la compañía perteneciente al empresario cubanoamericano Hugo Cancio.

En el clip se puede ver a la hija de Coralita Veloz promocionando la venta de loncheras con diferentes productos para que los niños lleven a la escuela en Cuba, mientras asegura que “Katapulk tiene muchísimas ofertas para la lonchera de tu hijo”, como galleticas, jugos, y pancitos.

El comercial hizo estallar las redes pues los usuarios, sobre todo residentes en la Isla, consideraron una falta de respeto que alguien promocione productos que hace mucho tiempo los niños cubanos no ven y que la inmensa mayoría de los padres antillanos no se pueden permitir.

Además, son artículos que tienen que ser comprados por los familiares que viven fuera del país a través de internet, porque en las tiendas de la Mayor de las Antillas no se encuentran las “ofertas” que menciona Alvariño.

Debido a toda esta polémica, la hermana de la actriz, María Karla Rivero y Jean Michel Jomolca, calificaron de “horrible” y “humillante” el clip y, por ende, la participación de la intérprete.

“Es un horror y un espanto. Me parece una ofensa para las madres cubanas, principalmente para los niños cubanos. Me pareció espantoso cuando lo vi”, aseguró Jean Michel Jomolca, quien tiene junto a Rivero, un popular programa en YouTube conocido como la Casa de Maka.

Igualmente, aseveraron que muchos de sus suscriptores le estaban pidiendo explicaciones sobre qué pensaban del lamentable video, el cual ha indignado no solo al exilio, sino también a muchos cubanos dentro de la Isla.

“Ese comercial es vergonzoso, el humillante y desacertado. Todos sabemos la miseria que hay en nuestro pueblo de Cuba. Todos sabemos que para mandar a los niños a la escuela con un pancito con azúcar cuesta”, aseguró.

“Estoy en total desacuerdo porque sé la realidad de Cuba. Para mí esto ha sido mucho más complicado. Es un tema familiar”, fueron las palabras de María Carla.

Esta no es la primera polémica que desata Alvariño por colaborar estrechamente con Katapulk. El pasado mes de julio su rostro apareció en un cartel publicitario en el Palmetto, donde la empresa promocionaba a Etecsa, el monopolio estatal de las comunicaciones en Cuba, el cual es utilizado como herramienta represiva por parte del gobierno castrista, que desconecta los servicios cuando quiere evitar que las protestas y los actos represivos sean trasmitidos.

Debido a la crítica de la diáspora, y a quienes terminaron pagando para que la vaya fuera removida, la publicidad fue retirara y remplazada con otra que resaltaba al exilio cubano. Aunque está legalmente registrado fuera de Cuba, el negocio de Katapulk, opera dentro de la Isla.