Fin del acuerdo médico Cuba-Kenia: incierto futuro para los dos galenos secuestrados

El contrato para asistencia médica cubana en Kenia estuvo vigente desde 2017. (Captura de pantalla: DW – YouTube)

El gobierno de Kenia puso fin al acuerdo de colaboración sanitaria con Cuba, por lo cual todos los médicos cubanos de misión en esa nación africana deberán regresar a la Isla caribeña. Sin embargo, lo que más preocupa es el futuro de los dos galenos secuestrados en 2019, para los cuales ahora se abre un futuro incierto sobre la posibilidad de seguir presionando a las autoridades de Nairobi para que identifiquen su paradero.

La ministra de Salud, Nakumicha Wafula, comunicó la decisión gubernamental que había sido largamente pedida por el gremio médico local. Ahora, las plazas vacantes que deja la delegación de galenos cubanos serán ocupadas por profesionales sanitarios kenianos que se han ido formando en cursos recientes.

Los doctores de Kenia habían estado protestando desde que se realizó el convenio médico con Cuba, pues a los extranjeros les pagaban mucho mejor que a los profesionales locales; aunque es justo decir que el dinero de las misiones médicas es controlado por el gobierno castrista, que solo le entrega una parte a los profesionales del sector.

El acuerdo, firmado en 2017, permitió que 50 kenianos se formaran en Cuba, mientras más de 100 médicos cubanos se integraban a hospitales de Kenia. Legisladores y el Sindicato de Médicos, Farmacéuticos y Dentistas de Kenia criticaron duramente estas negociaciones, alegando que había profesionales kenianos desempleados en su propio país mientras los cubanos ocupaban plazas por las que le pagan el doble.

Revelaciones recientes del diario The Standard indican que por cada médico cubano el gobierno de Kenia pagaba un salario mensual de 625.000 chelines (unos 4.200 dólares estadounidenses).

Por la parte cubana, el peor escenario se dio en abril de 2019, cuando los doctores Assel Herrera Correa y Landy Rodríguez Hernández fueron secuestrados por la milicia Al-Shabab. Años después, aún se desconoce su paradero y situación actual. La prensa local ha especulado que el grupo yihadista nunca pidió un rescate por los médicos, pues su objetivo es que los dos cubanos funcionen como doctores de la milicia y atiendan a los enfermos y heridos por los combates.

Entre los escasos avances de la investigación, en marzo de 2022 se conoció que el chofer somalí Isaac Rabow recibió una sentencia de cadena perpetua por colaborar en el secuestro, cuando la milicia intervino el vehículo en la carretera y se llevó a los dos cubanos rumbo a Somalia.

El régimen cubano, conocido por su exportación de servicios médicos, ha sido objeto de numerosas denuncias, debido a que los galenos enfrentan condiciones de esclavitud, e inclusive les decomisan sus pasaportes, les prohíben socializar con locales y no reciben un salario completo.