DEPORTES
Franklin Aballe pide la baja del béisbol cubano tras «discrepancias» con autoridades de Holguín
El estelar receptor sale por la puerta de atrás del mundo deportivo tras jugar 17 Series Nacionales
En su última campaña, Aballe demostró su habilidad en el juego, no cometió errores en la receptoría y atrapó a 29 corredores en el intento de robo. (Foto: Captura de pantalla)
El mundo del béisbol cubano, en especial el de los aficionados holguineros, recibió una sorpresiva noticia, pues el receptor Franklin Aballe solicitó la baja del movimiento deportivo tras “discrepancias” con las autoridades.
La salida por la puerta de atrás del estelar receptor causo conmoción en redes sociales, después de 17 temporadas en las Series Nacionales de Béisbol (SNB) donde derrochó dedicación y éxitos tanto en la defensa como en la ofensiva, calzando los arreos de los Cachorros holguineros.
“Tras algunos desacuerdos con la comisión provincial de béisbol y la dirección de deportes al mismo nivel, el máscara, natural del municipio de Gibara, entregó los atuendos de la receptoría y ni siquiera se quedará en el organismo deportivo, según confesó el jugador”, explicó el comentarista deportivo Flabio Gutiérrez, que trabaja para el diario oficialista Ahora.
La partida intempestiva del nacido en Gibara representa una pérdida significativa para los Cachorros Holguineros, quienes dependerán en la próxima Serie Nacional de Nelson Batista y Víctor Paz, dos jugadores talentosos pero con menos experiencia en una posición clave del juego.
La trayectoria de Aballe ha sido reconocida por los fanáticos del béisbol cubano, quienes han expresado su frustración por la pérdida de un atleta de su talla y calidad. El usuario Amable Quintana comentó que no es posible “perder atletas de esta talla y que tanta falta nos hacen, como él hay miles en nuestro béisbol”.
En su última campaña, Aballe demostró su habilidad en el juego, no cometió errores en la receptoría y atrapó a 29 corredores en el intento de robo. A la ofensiva, promedió 308 de average, con 10 jonrones, 13 dobles y 38 carreras impulsadas.
La desmotivación y la salida de los peloteros cubanos del movimiento deportivo en busca de mejores oportunidades son un reflejo de la crisis económica y política que enfrenta Cuba en la actualidad. Muchos jugadores de béisbol han decidido abandonar el país en busca de un futuro más estable y remunerador, lo que ha afectado la calidad del deporte en la Isla.
Otros simplemente adelantan el final de sus carreras para dedicarse a otras actividades que le permitan dar sustento a sus familias o se encaminan a emigrar, como han hecho muchos atletas ya retirados. Por ejemplo, el lanzador Ciro Silvino Licea o la campeona olímpica de jabalina Osleidys Menéndez.
La falta de recursos y apoyo gubernamental para los deportistas ha llevado a una pérdida de motivación entre los jugadores, quienes a menudo tienen que lidiar con condiciones precarias y salarios insuficientes. Además, la escasez de alimentos y medicinas es un problema constante en Cuba, lo que hace difícil para los atletas mantener un estilo de vida saludable y dedicarse de manera plena a su deporte.
La situación se ha agravado con la pandemia de COVID-19, que ha agudizado las dificultades económicas del país y ha limitado aún más los recursos para los deportistas.
