Hospitales cubanos sustituyen oxígeno medicinal por aire comprimido

El alto número de casos positivos al COVID-19 en toda Cuba unido a una inoportuna rotura de una fábrica de oxígeno que envasa el vital gas en cilindros para su distribución ha provocado un enorme déficit en la red de hospitales y centros de aislamiento.

Ante tal circunstancia el gobierno cubano optó por sustituir el oxígeno medicinal, que por norma debe contener una concentración de entre 99 a 100% de O2 por aire comprimido que se fabrica de urgencia en unidades militares y marinas recreativas del Ministerio del Turismo.

El aire comprimido que se utiliza en el llenado de los tanques de buceo -originalmente utilizados por escasas horas en la inmersión en aguas profundas- contiene una mezcla de gases que emulan el aire que respira normalmente en la superficie terrestre. Estos gases tienen una mezcla de 21% de oxígeno, 78% de nitrógeno y una porción de vapor de agua.

Por lo tanto, el efecto que produce el aire comprimido en los pacientes de COVID-19 es nulo. Ellos necesitan oxígeno medicinal para que llegue el O2 puro a los pulmones dañados por el virus y no una mezcla que asemeje el aire normal que se respira pues ya es un hecho que no pueden respirar normalmente y por eso necesitan oxigeno medicinal.

Las denuncias de esta problemática en la cual las autoridades sanitarias engañan a los familiares y pacientes con COVID-19 se hizo más evidente con una publicación oficial en el perfil de Facebook de la Televisión Avileña.

Publicación en Facebook, actualmente borrada. (Foto: Captura de Pantalla-Facebook/TV Avileña)

“Los trabajadores de la Marina Marlin Azulmar, radicada en el poblado de Júcaro, trabajando durante 24 horas para garantizar el llenado de cilindros con aire comprimido, su aporte para el enfrentamiento a la pandemia”, revela una nota publicada por el citado telecentro provincial que lejos de servir como reconocimiento a los trabajadores de la Marina Marlin constituye una clara evidencia del despropósito con el cual se maneja la crisis sanitaria en Cuba.

Las crisis en los sistemas sanitarios debido a la pandemia de coronavirus no son exclusivas de Cuba, pues otros países con mayores recursos han pasado por situaciones igualmente trágicas. La diferencia radica en la honestidad de los dirigentes políticos y sanitarios y de la libre expresión de la sociedad civil de otros países que sí reconocen la diferencia de emplear aire comprimido en sustitución del oxígeno medicinal.

Carlos Rius Alonso, académico de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), reconoció que “utilizar aire comprimido u oxigeno industrial con fines médicos quizá ayudaría a resolver el problema de manera momentánea, pero si su empleo es frecuente podría traer efectos secundarios como irritación pulmonar”.

Los pacientes con neumonía avanzada provocada por el virus surgido en Wuhan, China, tienen una condición más crítica y el suministro de aire comprimido en lugar del oxígeno medicinal con altos niveles de pureza de O2, lejos de ayudar perjudica de manera extrema.

El secretismo y el maquillaje de las cifras oficiales de pacientes en salas de terapia intensiva y fallecidos también daña la poca credibilidad que le queda a un sistema sanitario que fue catalogado, por deseos de un dictador, como “potencia médica”.