Jardinero cubano multado con 2.000 pesos por decir “tengo hambre”

Jardinero cubano recibió una multa de 2.000 pesos (Collage: Kelvis Labañino – Facebook)

“Tengo hambre, no hay nada que comer, debí haber muerto”, por decir esta frase en voz alta, el jardinero cubano Ángel Granados Santiesteban recibió una multa de 2.000 pesos por parte de agentes de la Seguridad del Estado.

El activista Kelvis Labañino compartió desde su cuenta de Facebook esta situación arbitraria que viven muchos cubanos por decir la verdad, incluso algunos terminan multados y en la cárcel.

Labañino comentó en su post que un chivatón fue a denunciar a Granados Santiesteban, residente de Melena del Sur, provincia de Mayabeque, para que recibiera un castigo por usar su libertad de expresión.

“Alguien escuchó, llamó a la policía política que llegó más rápido de lo que llega una ambulancia o un carro fúnebre, le costó, multa y retrasar el trabajo que realizaba chapeando un patio, ¿hasta cuándo mi gente?, ¡no más Patria o Muerte! ¡súmense a Patria y Vida!”, manifestó.

Labañino también recriminó en su post el uso de métodos represivos hacia cualquier personas que realice expresiones de disidencia o hablen con la verdad como lo hacen integrantes del Movimiento San Isidro, Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) y periodistas independientes.

El activista dijo que esa verdad que trata de ocultar el gobierno es la que “nos ilustra cada día lo que es vivir en la Isla cárcel, paraíso comunista caribeño que tanto se empeña el NTV de blanquear”.

Una gran cantidad de cubanos como Granados Santiesteban están pasando hambre ante la escasez de alimentos en todo el territorio y la preferencia de surtido que da el gobierno a las tiendas que operan con dólares.

Residentes que no tienen acceso a la moneda estadounidense se la pasan en colas tratando de conseguir un poco de comida en los establecimientos de moneda local que siempre están desabastecidos.

Activistas de la UNPACU tratan de ayudar a las personas afectadas, principalmente ancianos, regalándoles comida pero hasta esta acción es vista como un acto subversivo y por ello son víctimas de crueles actos represivos.

Miembros de dicha organización opositora y otros activistas se encuentran en huelga de hambre por el cerco policial que se instaló en los alrededores de la sede de la UNPACU, en Santiago de Cuba, para que no se siga entregando la comida, ni medicamentos.

José Daniel Ferrer, líder de la citada organización, denunció en redes sociales que el cerco está afectando al menos a 200 personas que pasan muchas dificultades para conseguir comida.

El expreso político comentó este domingo que 60 activistas se encuentran en huelga de hambre, 51 en Cuba y uno en Estados Unidos, algunos con afectaciones preocupantes.