FARÁNDULA
Katy Perry viaja al espacio junto a otras destacadas mujeres: “Tengo que cantar allá arriba”
“Habrá otras misiones solo de mujeres, pero solo una será la primera”

La misión fue llevada a cabo por la empresa Blue Origin de Jeff Bezos. (Captura de pantalla @ Blue Origin – YouTube)
La cantante Katy Perry, la ingeniera de cohetes Aisha Bowe, la astrofísica Amanda Nguyn, la periodista Gayle King y la cineasta Kerianne Flynn, acompañadas por la periodista y piloto Lauren Sánchez, novia de Jeff Bezos, se han convertido en las primeras mujeres en realizar una misión espacial completamente femenina.
Esta misión, llevada a cabo por la empresa Blue Origin, propiedad de Bezos, marca un avance significativo en la representación de las mujeres en la exploración espacial.
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El despegue tuvo lugar este lunes 14 de abril a las 15:30 horas, desde Texas, a bordo del cohete New Shepard, cuyo nombre rinde homenaje a Alan Shepard, el primer estadounidense en viajar al espacio en 1961. La misión, que formó parte de un esfuerzo por promover la presencia femenina en el sector espacial, duró un total de 11 minutos, durante los cuales las participantes experimentaron la ingravidez en la frontera del espacio.
Durante este breve, pero significativo viaje, Katy Perry no solo disfrutó de la experiencia, sino que también cautivó a sus compañeros de misión con un emotivo momento al cantar What a Wonderful World. Tras el aterrizaje, la cantante expresó su emoción: “No puedo recomendar más esta experiencia… le pongo un 10”, afirmó, subrayando la conexión profunda con el amor que le provocó el espacio.
Lauren Sánchez, que desempeñó un papel clave en la organización de esta misión, manifestó su satisfacción con la importancia de esta experiencia. “Me siento superconectada al amor. Esta experiencia me ha enseñado que nunca sabes cuánto amor tienes dentro de ti… y cuánto amor recibes hasta el día que despegas”, señaló al aterrizar.
El propio Jeff Bezos estuvo presente en la base de lanzamiento y acompañó a las astronautas hasta la cápsula. Tras el despegue, fue uno de los primeros en recibirlas al aterrizar, donde se fundió en un emotivo abrazo con Sánchez.
Un paso hacia la igualdad en la exploración espacial
La misión NS-31, en la que participaron figuras destacadas como la activista y astrofísica Amanda Nguyn, también buscó resaltar la importancia de la diversidad de género en la industria espacial. La exingeniera de la NASA, Aisha Bowe, compartió su emoción tras el vuelo: “Nunca volveré a ser la misma”, aseguró, destacando el impacto personal que tuvo la experiencia.
Por su parte, Gayle King, conocida por su trabajo en CBS y su amistad con Oprah Winfrey, reflexionó sobre su experiencia: “El silencio y la tranquilidad me dejaron una sensación indescriptible”, dijo, antes de invitar a los jóvenes a soñar en grande: “Ningún sueño es demasiado grande”.
Además, la importancia de este vuelo fue destacada por Oprah Winfrey, quien estuvo presente en la plataforma de lanzamiento. “Habrá otras misiones solo de mujeres, pero solo una será la primera”, expresó, subrayando el simbolismo histórico del evento.
Este vuelo histórico sigue a la incursión de Jeff Bezos en el espacio en 2021, cuando se convirtió en uno de los primeros millonarios en realizar un viaje suborbital. En esa misión, Bezos estuvo acompañado por su hermano Mark, el estudiante Oliver Daemen y la piloto Wally Funk, quien a sus 82 años se convirtió en la persona más longeva en viajar al espacio. Funk, al igual que otras mujeres astronautas pioneras, había enfrentado barreras de género en la NASA en los años 60.
El creciente interés por los vuelos suborbitales, liderados por compañías como Blue Origin y Virgin Galactic, marca una nueva era en el turismo espacial. Aunque aún no se ha revelado el costo exacto de estos vuelos, los de Virgin Galactic tienen un precio de 600.000 dólares, mientras que Blue Origin sigue buscando democratizar esta experiencia. Estos vuelos, que cruzan la línea de Kármán, a 100 kilómetros de altitud, permiten que los turistas espaciales sean considerados astronautas, aunque el entrenamiento profesional de astronautas es más extenso.
A pesar de los avances, las mujeres siguen siendo una minoría en las misiones espaciales. Sin embargo, desde el primer vuelo de Valentina Tereshkova en 1963, el número de mujeres astronautas ha aumentado significativamente, y esta misión histórica refuerza el compromiso de integrar a más mujeres en la exploración del espacio.
