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La basura rodea y contamina el acueducto de Arroyo Naranjo
Las montañas de residuos en las cercanías de la fuente de agua son visibles hasta desde Google Maps
Residentes del municipio Arroyo Naranjo, en La Habana, se enfrentan a una grave crisis sanitaria debido a las condiciones insalubres del acueducto local. El agua, descrita por los habitantes como “verde de tanta pudrición”, plantea serios riesgos para la salud.
El alarmante escenario fue confirmado por varios vecinos, quienes además proporcionaron fotografías que muestran los basureros circundantes, contaminando el área inmediata de la presa que suministra agua a la región.
La situación en Arroyo Naranjo se ha deteriorado significativamente, con toneladas de basura acumulándose alrededor del acueducto. Estos desechos no solo comprometen la calidad del agua, sino que también representan un peligro ambiental inminente. Las imágenes enviadas a la redacción de Periódico Cubano revelan la magnitud del problema, mostrando montañas de residuos en las cercanías de la fuente de agua que pueden ser visibles hasta por Google Maps.
La comunidad, preocupada por su salud y bienestar, ha expresado descontento y miedo ante esta situación. El agua contaminada no es solo un riesgo para la salud humana, sino que también afecta la higiene y la calidad de vida de toda la región. La presencia de basureros en el perímetro de la cerca que bordea la presa es una clara violación de las normas sanitarias y ambientales del propio gobierno que administra la empresa.
“La respuesta de las autoridades Arroyo Naranjo ante esta crisis aún está por verse. Hasta el momento no se han pronunciado al respecto, a pesar de que la basura llega hasta el muro posterior de la estación de policías del Capri, que está frente al acueducto”, escribió a nuestra redacción una fuente anónima que prefirió no ser identificada.
Los habitantes de Arroyo Naranjo esperan acciones inmediatas para resolver esta situación crítica. La limpieza de los basureros y la purificación del agua del acueducto son medidas urgentes que se deben implementar para evitar mayores riesgos a la salud pública.
El agua de los estanques puede volverse verde al contaminarse con productos químicos como herbicidas y pesticidas, los cuales pueden alterar el equilibrio ecológico y promover el crecimiento de algas. En este caso, las lluvias, al caer sobre la basura, arrastran hasta el suelo los componentes químicos de los residuos que se filtran al manto freático que comunica con el embalse aledaño.
También la exposición prolongada a la luz solar, especialmente en estanques poco profundos, puede acelerar el crecimiento de las algas. La falta de circulación en el agua del estanque puede conducir a condiciones anóxicas (bajas en oxígeno), que favorecen el crecimiento de algas y bacterias.