La burocracia agraria vuelve a sabotear la producción

Hace pocas semanas publicamos un post en el que se hacía referencia al mal trabajo del ministerio de la agricultura (así con minúsculas) y del resto de las instituciones que trabajan en este sector, incapaces de garantizar más del 20% de la comida de los cubanos.

Esta semana publicamos otra diciendo que han decidido obligar a pagar impuestos a los campesinos, tanto a los propietarios como a los usufructuarios. Decía Eduardo Galeano que burócrata es aquel que para cada solución es capaz de encontrar un problema.

La burocracia agraria en vez de incentivar la producción le pone zancadillas. Mientras otros países subvencionan el campo, aquí le aplican impuestos. A los guajiros no se les paga a tiempo, se les dejan perder las cosechas, no les venden insumos suficientes y ahora, además, les quieren sacar dinero.

Cada medida que una institución cubana tome tendría que ser valorada de cara a los grandes objetivos de la nación y ninguna resolución que los contradiga debería aprobarse. ¿Alguien puede creer que este gravamen favorece el crecimiento de las cosechas y la reducción de importaciones?

Tomado de: Blog Cartas de Cuba. (Autor: Fernando Ravsberg)