Las empresas fantasmas que los López-Calleja manejan en Liechtenstein

EEUU añade la “lista negra” a Luis Alberto Rodríguez López-Callejas jefe de GAESA y ex yerno de Raúl Castro. (Foto: Cubanet)

Durante los últimos 37 años, una empresa creada en Liechtenstein ha servido como el centro de operaciones de envío global para el Gobierno cubano en su intento por eludir el embargo comercial durante seis décadas, según reveló una investigación del Miami Herald.

La compañía, con sede en el paraíso fiscal de Liechtenstein, ha servido durante los últimos 37 años como el centro de las operaciones de envío global para el gobierno cubano, funcionando bajo el radar mientras eludía un embargo comercial de seis décadas.

Acemex Management Company Limited se creó en 1984 y el modelo de negocio ha demostrado ser duradero y eficiente.

La investigación del Miami Herald revela la red de empresas fantasma ocultas y jurisdicciones secretas que permitieron a Fidel y Raúl Castro y ahora a sus sucesores militares pedir dinero prestado y comprar, vender y fletar los barcos que traen químicos, combustible y construcción. suministros necesarios para construir el creciente sector turístico y exportar minerales.

Los hallazgos se basan en informes anteriores publicados en febrero como parte de una colaboración de investigación global llamada OpenLux, que destacó cómo la pequeña nación europea de Luxemburgo se utilizó como camuflaje para las operaciones marítimas cubanas.

La nueva investigación arroja luz sobre la poco conocida Acemex y los actores clave que la rodean: un par de poderosos hermanos cubanos que no se llaman Fidel y Raúl, sino Guillermo Faustino Rodríguez López-Calleja y su hermano menor Luis Alberto. Este último es un general de brigada incluido en la lista negra de Estados Unidos en 2020.

Acemex sirvió como un paraguas que cubría a decenas de otras empresas vinculadas a Cuba cuyos vínculos con la isla debían disfrazarse para operar de manera efectiva.

A través de Acemex, los hermanos expandieron el control del ejército cubano sobre la actividad económica y concentraron en pocas manos el transporte y la logística global de Cuba.

Además de proporcionar a los prestamistas y empresas europeos y asiáticos un grado de cobertura cuando participaban en Cuba, los caparazones también abrieron oportunidades para que los gobernantes se enriquecieran.

Hal Eren, un abogado veterano en sanciones que trabajó en la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro, o (OFAC), de 1992 a 2000, dijo: “Han aprendido lecciones y usted sabe que la práctica hace al maestro”, según Miami Herald.

La OFAC tiene el poder de convertir a una empresa en un paria financiero, intocable en las finanzas globales. Inexplicablemente no lo ha hecho con Acemex.

Sin embargo, el abogado señaló que por las sanciones que le ha impuesto Estados Unidos desde finales de la década de los 50 a la isla, la red fantasma de Cuba ha disminuido, aunque aún no se sabe cómo serán las medidas que tome el actual presidente Joe Biden.

“Toda administración debe utilizar todas las herramientas disponibles para responsabilizar a las entidades e individuos vinculados a regímenes despóticos en nuestra región, así como a aquellos que les permitan enriquecerse ilegalmente a través de esquemas elaborados y empresas fantasma”, dijo el senador Marco Rubio.

Además, agregó: “Es hora de que nuestros aliados europeos se den cuenta de que la dictadura cubana y sus compinches se están enriqueciendo en sus costas a expensas del pueblo trabajador de Cuba que ha soportado décadas de opresión”.

Según la investigación, Cuba depende de empresas genéricas en varios Estados. “Liechtenstein, Luxemburgo, estos son paraísos favoritos no solo para los cubanos sino para otros que desean permanecer fuera del radar”, dijo el ex asesor principal del Departamento del Tesoro sobre sanciones, Eren.