Lázaro Mireles por fin recibe un buen trato en el consulado de Cuba en Madrid

Tras recibir una pésima atención cuando intentó renovar su pasaporte, el cubano residente en España Lázaro Mireles Galbán por fin pudo hacer este trámite en el consulado cubano en Madrid.

A inicios de febrero, Mireles Galbán llegó a la sede diplomática para solicitar dicho servicio, necesario para que no sea considerado un indocumentado en el país europeo, sin embargo, los responsables del edificio lo expulsaron violentamente porque fue un participante en la Marcha de Los Prohibidos.

La vicecónsul fue quien se encargó de expulsarlo con ayuda de elementos de seguridad y además la funcionaria le dijo que quienes tienen problemas con Cuba no tienen el derecho de entrar al consulado.

Cabe mencionar que dicha marcha fue una manifestación realizada por cubanos de diversas partes del mundo hacia las sedes diplomáticas cubanas para exigir el cese a la violación de los derechos humanos y prácticas discriminatorias en la isla por razones políticas.

Hoy jueves todo fue diferente. Primero el funcionario que grabó la marcha desde el frente del consulado lo recibió amablemente, le entregó una planilla y brindó asesoramiento durante todo el proceso. Incluso, le permitieron estar delante de personas que habían llegado horas antes.

El cubano residente transmitió en vivo todo el trámite y al final, cuando terminó, se le indicó el tiempo que debe esperar para recoger su pasaporte actualizado y fue despedido de la sede con mucha cordialidad.

“Esto es una manera más de demostrar que en la unión de la gente está la victoria. Esto se ha logrado gracias a tantísima gente por el mundo, tantos medios que se hicieron eco. Demuestra que el día que seamos capaces de unirnos de verdad todos los cubanos, lograremos liberarnos de la dictadura”, aseguró Mireles Galbán.

Cabe mencionar que antes de iniciar el trámite, Lázaro se tomó una foto con la bandera de Cuba al fondo y la publicó en su cuenta de Facebook con el mensaje: «Si esta fuese mi última fotografía, quisiera vivirla con un trocito de mi patria».

Además agregó que «nadie es capaz de imaginar el dolor; el estrés constante; el corazón oprimido de quien tiene que vivir, como yo, aun en tierras de libertad, opresión, coacción, represión».

Con Información de Diario de Cuba