Los cubanos Alexis Vila y Roberto Isaac son declarados culpables de violento homicidio

Tras casi dos horas de deliberación en una corte de Miami, los cubanos Alexis Vila Perdomo y Roberto Isaac fueron declarados culpables por el violento asesinato de Camilo Salazar, quien era amante de la esposa del expropietario de supermercados Presidente.

Ambos cubanos fueron contratados por dicho empresario, de nombre Manuel Marín, para cometer el homicidio y desaparecer el cuerpo que fue hallado en los Everglades.

En el crimen también estuvo involucrado el luchador de artes mixtas Ariel Gandulla, quien aceptó su culpabilidad y en el juicio testificó en contra de los otros acusados a cambio de libertad condicional y deportación inmediata a la Isla después de que cumpla una condena de 36 meses.

Nuevo Herald informó que Vila Perdomo, excampeón olímpico y también luchador de artes mixtas, se le dictó una culpabilidad por el cargo de confabulación porque, según las pruebas, se encargó de coordinar el homicidio.

Mientras que Roberto Isaac, que laboraba como promotor de boxeo, recibió el cargo de asesinato en segundo grado.

La reconstrucción del caso señala que los victimarios dieron una brutal golpiza a Salazar con un palo de golf, luego lo degollaron, quemaron sus genitales y finalmente lo tiraron en dicha zona de Florida.

Gandulla, conocido como “La Pantera” dijo en sus declaraciones que fue engañado por los mencionados para participar en el secuestro del fallecido que se registró en plena calle de Miami.

En el juicio señaló que Isaac era el encargado principal para cometer el secuestro, mientras que Vila coordinaba vía telefónica desde Las Vegas, donde estaba entrenando para un combate.

Sin embargo, los abogados defensores aseguran que la versión de Gandulla es falsa y está tratando de buscar algún beneficio.

Aunque los registros telefónicos de los involucrados son rechazados por la defensa, la fiscal estatal adjunta de Miami-Dade, Gail Levine comentó que son evidencia abrumadora porque las llamadas entre los detenidos se cortaron después del crimen y además un rastreo de teléfonos móvil prueba que Isaac y Marín estuvieron al mismo tiempo en una zona de los Everglades.

En el juicio, la exesposa del empresario involucrado, Jenny Marín, relató a los magistrados acerca de la relación que mantenía con Salazar y también recordó que ella denunció a Manuel Marín, días después de que éste huyó de Florida hacia Europa.

El expropietario de dicha cadena comercial fue detenido en España y posteriormente se le extraditó a EEUU donde espera encarcelado el inicio de su juicio programado para el mes de junio del próximo año.