Más detalles sobre Boris Arencibia: cubano de Miami organizador del Santa María Music Fest

Arencibia vive en Florida, pero organiza evento con el régimen castrista. (Captura de pantalla: Elboris7 – Instagram)

El empresario cubano Boris Arencibia, quien reside en Miami, atrajo las miradas hacia su persona al declarar que él es el principal organizador del Santa María Music Fest, evento vinculado a empresas del conglomerado GAESA, entidad perteneciente al Ministerio de las Fuerzas Armadas (FAR) del régimen castrista.

El portal independiente 14yMedio compartió diferentes datos que revelan la identidad de este sujeto que, según sus palabras, solo busca promover el cambio de mentalidades y vidas en Cuba a través del evento musical.

Boris Arencibia nació en Pinar del Río y se volvió destacado practicante del judo. Luego de lograr el título de campeón siete veces en su tierra natal, aprovechó una salida internacional para supuestamente no volver a la Isla.

El medio informó que su fuga ocurrió en San Juan, Puerto Rico, durante el año 1993. Posteriormente, llegó a Estados Unidos, donde reanudó su carrera deportiva, pero luego se cambió al mundo del entretenimiento.

Arencibia fundó la famosa discoteca Liquid en la Isla del Encanto, donde artistas icónicos como Calle 13, Wisin y Yandel, y Daddy Yankee deleitaron al público. Además, estableció Caribbean Promotions, agencia que representa a destacados boxeadores exiliados, incluyendo a los cubanos Guillermo Rigondeaux, Yudel Johnson, Yordanis Despaigne y Yuniel Dorticós, muchos de ellos medallistas olímpicos.

Su último proyecto, el festival en el cayo cubano, ha sido el que más ha dado de qué hablar. Según Arencibia, la motivación detrás del evento es fomentar la unidad entre los cubanos, independientemente de su ubicación geográfica.

“Mi mensaje es claro y poderoso: demostrar a todos los cubanos que podemos contribuir y desarrollarnos en nuestra propia nación”, afirmó en una declaración vía Instagram, que causó indignación en la comunidad cubanoamericana.

La reciente edición del festival ha sido más noticiosa por sus negligencias que por el cartel de cantantes ofrecido al público. Los asistentes enfrentaron sobreventas de habitaciones y retrasos en el transporte. Además, el personal de los hoteles no fue amable con los asistentes locales, de acuerdo con las denuncias que circularon en redes sociales.

El popular creador digital Juanka pagó 100.000 pesos cubanos por un paquete turístico que incluía el traslado desde La Habana hasta el cayo. Sus expectativas se derrumbaron al esperar siete horas el transporte en la Villa Panamericana.

Otro acto incongruente fue la presencia del cantante Lenier Mesa, quien en varias ocasiones había asegurado que no iría a presentarse a La Habana. Aunque dijo que solo visitaba a su abuelo enfermo, se le vio en plena fiesta con el Tekashi 6ix9ine, uno de los artistas invitados al festival.