Médico cubano opositor Alexander Figueredo rechaza el exilio ante la represión en su contra

El médico cubano opositor Alexander Figueredo no va a irse de la Isla (Collage: Alexander Figueredo – Facebook)

El médico opositor Alexander Figueredo Izaguirre hizo a un lado su idea de pedir asilo en otro país, tras ser invalidado su derecho a ejercer la medicina en Cuba, y aseguró que continuará en la Isla manteniendo firme sus denuncias contra el régimen comunista.

“Yo no me voy, yo me quedo, pero no pienso morir como viví”, comentó en Facebook el galeno que comenzó a denunciar las deficiencias del castrismo al no poder salvar la vida de su padre por la falta de medicinas y equipo clínico.

Figueredo Izaguirre también dijo en el mismo post que quiere comprar una laptop o una computadora de escritorio para hacer directas y ediciones en video.

“A los miles que han decidido partir hacia Nicaragua, si tienen una buena laptop o PC de escritorio con webcam, auriculares con micrófono que me sirva para hacer directas y ediciones de videos y la van a vender para hacer dinero. Por favor, escríbanme al privado que estoy comprando una”, indicó.

En tono de burla hacia las acusaciones sin pruebas por parte del castrismo, también comentó que “suave con los precios que la CIA aún no me ha pagado”.

En noviembre pasado, Figueredo Izaguirre recibió un documento oficial firmado por el ministro de Salud Pública, José A. Portal Miranda, en donde se le notificaba que ya no tenía el permiso para ejercer la medicina en territorio cubano.

“Ha causado un daño moral a la imagen de la salud en Cuba, ventilando carencias existentes dentro del sector y mostrando una actitud inobservante de los principios éticos”, decía la notificación que evidentemente era por motivos políticos.

En el mismo documento recibió la amenaza de que enfrentaría un proceso penal o civil por sus denuncias.

El especialista de primer grado en Medicina General integral y residente de Urología recriminó en aquella ocasión que perdiera su título por declararse anticomunista y no por violar el juramento hipocrático.

“Me declaré enemigo de todas las injusticias que están haciendo aquí, no solamente en el sistema de salud, sino en todo, y que queremos un cambio. Sin embargo, ellos optaron por la represión. Se sienten dueños de cada ciudadano”, agregó a su denuncia vía YouTube.

Antes de la notificación, el gobierno cubano lo expulsó del policlínico “13 de marzo”, ubicado en la provincia de Granma, el integrante del Gremio Médico Cubano Libre también había recibido una sanción con la prohibición de trabajar en el sector durante cinco años.