Medidas de prevención y tratamiento del coronavirus en Cuba: antes y después de los primeros casos diagnosticados

En la noche del 11 de marzo se confirmaban los primeros casos de personas afectadas por coronavirus en Cuba: tres extranjeros, italianos, que estaban de visita en la isla. Al día siguiente, se anunciaba el cuarto caso y primer cubano. Desde entonces, todo parecía sin novedad. Todo controlado.

Sin embargo, desde hacía un tiempo atrás, cuando aún no se registraba ningún caso, se tomaban algunas acciones encaminadas a la prevención de esta enfermedad.

• • En enero se reforzaban las medidas de control sanitario en las fronteras. Se avanzaba en la vigilancia epidemiológica en los aeropuertos.

Por aquel entonces, buscaron y desempolvaron viejos planes ante situaciones de brotes epidémicos antiguamente empleados cuando el Zika o el Chikungunya azotaban.

El día 5 de marzo, el Consejo de Ministros había aprobado el Plan para la Prevención y Control del nuevo Coronavirus, un nuevo manual que respondía a las necesidades actuales. Este, según el presidente del país, estaba encaminado a evitar que entrara en la isla la epidemia.

• • Los primeros pasos, al no haber reporte de ningún caso en la isla, se centraron en el control de las entradas internacionales.
  • Se venía trabajando en la capacitación del personal que podía tener contacto directo con contagiados (aduaneros, tripulaciones de aviones, trabajadores del turismo, hosteleros), con un doble objetivo: para que pudieran protegerse y estuvieran alertas para identificar posibles casos.

Sin embargo, muy pronto comenzaron a esparcirse rumores y sospechas de posibles casos en Cuba.

• • Se hizo un llamado a desechar la incertidumbre y ver en la correcta preparación del pueblo la mayor fortaleza. Comenzaron a aparecer spots y folletos en los que se daban recomendaciones del tipo: “lave frecuentemente sus manos”, “toser o estornudar cubriéndose con el ángulo del codo”.

Cuando se anunciaron los primeros casos, todo cambió. Se pasó de una primera fase informativa a estar alertas:

• • Se identificaron y acondicionaron locales en policlínicos y hospitales para atender pacientes con síntomas similares a los que causa el coronavirus; con todo un mecanismo creado (ambulancias, personal preparado y medicamentos) ante cualquier eventualidad.
  • Desde varios locales pertenecientes a empresas de producciones textiles se procedió a la confección de nasobucos.
  • Para evitar las aglomeraciones, el Ministerio de Cultura decidió posponer eventos masivos y espectáculos culturales en cines, teatros y demás instituciones.
  • Se instó a la población a acudir al área de salud más cercana ante cualquier síntoma respiratorio como tos seca, dificultad para respirar, fatiga o fiebre.
  • El control de focos y las pesquisas por parte de personal del sistema de salud también han sido de utilidad para identificar posibles casos y mantener la vigilancia clínico-epidemiológica.

Según se puntualizó en la Agencia Cubana de Noticias, y de acuerdo con Carmelo Trujillo Machado, jefe del Programa de Control Sanitario Internacional, el plan previsto en Cuba consta de etapas, con medidas específicas en cada una que están en correspondencia con los requerimientos del coronavirus COVID-19 en ese momento. Existe un plan nacional y, a su vez, cada organismo desarrolló el suyo propio.