Según publicó este jueves el diario estatal Juventud Rebelde, los destrozos que provocó en La Habana el tornado del pasado 27 de enero involucraron a 78 centros educacionales. La propia ministra del sector, Ena Elsa Velázquez Cobiella, confirmó al diario que se hacen grandes esfuerzos para poder continuar con el desarrollo del curso escolar.
No solo círculos infantiles, escuelas primarias y secundarias se vieron afectadas; también se vio seriamente dañada el recinto que alberga a más de 300 profesores de otras provincias, encargados de apoyar las actividades docentes en la capital por causa del déficit de maestros.
“Estamos trabajando en 58 centros y hemos recibido apoyo también de otras provincias; una brigada de Santiago de Cuba está trabajando en la escuela primaria Rodolfo Díaz, de Diez de Octubre; una de Guantánamo, en el politécnico Lázaro Peña, de Guanabacoa, y también debe llegar una de Camagüey que laborará en Regla”, informó Velázquez Cobiella.
“Tuvimos que reubicar en once instituciones, entre círculos infantiles y escuelas. Hay algunos centros que, aunque están afectados, fue posible reorganizar a los estudiantes dentro de la propia institución escolar”.
Los profesores cubanos como parte de la población que se encontraba dentro de los municipios afectados, también han visto afectadas sus viviendas por lo que cerca de 268 de ellos se mantiene alejados de las aulas en espera de poder resolver la situación constructiva de sus hogares.
El tornado que pasó por La Habana dejó daños en 4.800 viviendas, de las cuales 380 se derrumbaron totalmente. Unas 9.916 personas fueron evacuadas. El fenómeno atmosférico, de categoría EF4, provocó seis muertes y más de 130 heridos.
Con información de CiberCuba
