ESTADOS UNIDOS
Ómicron supera a delta: es la cepa de COVID-19 con más casos positivos en Miami-Dade
Tres de cada cuatro muestras corresponden a la nueva variante del coronavirus
Autoridades de Miami-Dade confirmaron que ómicron superó a la variante delta en contagios y se ha convertido en la cepa dominante de la pandemia de COVID-19 en el territorio del condado.
Daniella Levine Cava, alcaldesa de Miami-Dade, comentó al Miami Herald que el seguimiento a los casos positivos estableció que la nueva cepa pasó de un mínimo de contagios a registrar 3 de cada 4 muestras durante la segunda semana de diciembre.
Las muestras fueron analizadas por NOMI Health, empresa contratada por la administración demócrata de Levine Cava para la realización de pruebas, vacunaciones y secuenciación genética.
Esta empresa informó que el 76% de las 504 muestras tomadas el 14 y 15 de diciembre resultaron ser de ómicron, una cepa originada en Sudáfrica y que presenta un alto nivel de contagio.
Las autoridades estadounidenses han empezado a tomar medidas por esta nueva variante y también a exigir a la población que cumpla con las acciones preventivas, aunque se tenga un esquema completo de inmunización.
El doctor Anthony Fauci, principal epidemiólogo del gobierno de Estados Unidos, aseguró hace unos días que los hospitales de esta nación se volverán a llenar de personas contagiadas de COVID-19 a causa de la nueva variante.
“Veremos un repunte en las infecciones, no hay ninguna duda sobre ello. Pero hay una diferencia mayúscula en cuanto a la severidad entre una persona que haya recibido la vacuna y la dosis de refuerzo y una que no”, manifestó Fauci en una entrevista con NBC.
El experto recalcó la importancia de la inoculación con cualquiera de las vacunas permitidas en EEUU porque una tercera dosis puede reducir en gran medida el impacto de los síntomas de la ómicron.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho que los no vacunados tienen ocho veces más probabilidades de ser hospitalizados y 14 veces más probabilidades de morir de COVID-19.
Los registros de las últimas semanas indican que el 73% de los estadounidenses se han inmunizado luego de que la administración demócrata de Joe Biden estableció como una obligación la inoculación para poder seguir trabajando en las grandes empresas del país.
Ante el avance de la novedosa cepa, el gobierno anunció que se repartirán de manera gratuita 500 millones de pruebas para detectar la enfermedad a fin de que los ciudadanos se la puedan aplicar en sus hogares.
Asimismo, aseguró que el ejército instalará unidades sanitarias si se llegaran a llenar los hospitales, como ocurrió con la variante delta. Otra de las acciones es la apertura de sitios de pruebas federales comenzando con la ciudad de Nueva York.