La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo este miércoles que es importante reservar el uso del esteroide dexametasona, solo para el tratamiento de los casos más severos de COVID-19 y así salvar la vida de los pacientes graves con COVID-19, para quienes ha demostrado que tiene un beneficio.
El líder de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, sostuvo que la investigación por fin está dando esperanzas para el tratamiento del virus, que ha matado a más de 400.000 personas en todo el mundo e infectado a más de 8 millones.
Los resultados de los ensayos anunciados el martes por investigadores en Gran Bretaña mostraron que la dexametasona, un fármaco genérico usado desde la década de 1960 para reducir la inflamación en enfermedades como la artritis, bajó las tasas de mortalidad en alrededor de un tercio entre los pacientes con coronavirus más graves ingresados a un hospital.
Con estos reportes, este medicamento se convierte en el primer fármaco que se ha demostrado que salva vidas en la lucha contra la enfermedad. Los países se apresuran a asegurarse de que tienen suficiente a mano, aunque los funcionarios médicos dicen que no hay escasez.
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