Pastor de Santiago de Cuba arrestado durante el 11J es agredido en prisión

El religioso ha sido golpeado por otros reclusos, que presuntamente fueron enviados por las autoridades penitenciarias. (Foto: Lorenzo Rosales Fajardo-Facebook)

Lorenzo Rosales Fajardo, un pastor cubano que fue arrestado en Santiago de Cuba durante las protestas multitudinarias del 11J, está siendo maltratado en la prisión de Boniato.

La información fue confirmada por el líder religioso Alaín Toledano Valiente, quien indicó al medio de prensa Radio Martí que luego de haber sido detenido por manifestarse, el pastor recibió una fuerte golpiza dentro de la cárcel.

“Lo que conocemos es que ha sido agredido físicamente. Militares se pusieron de acuerdo para afectarlo a él, mandando reclusos que lo golpearan”, declaró Toledano.

El religioso también aseguró que las autoridades penitenciarias le prohibieron a Rosales tener contacto con él, pero el día de ayer pudo realizar una llamada en la que aseguró que estaba siendo víctima de estas agresiones.

“Él me dice que ahora ha podido hacer algunas relaciones dentro, con algunos reclusos, que Dios le ha dado gracia, pero que ha pasado momentos difíciles de agresión”, dijo el pastor.

Toledano considera que la historia se está repitiendo, pues no es la primera vez que un prisionero cubano es agredido por razones políticas.

“Ahora se repite con el pastor Lorenzo, está siendo agredido, está siendo atacado, y no creo que sea directamente porque los presos lo odian, porque la gente ama a Dios, y la gente respeta a los pastores aún dentro de la prisión”, añadió.

El líder religioso, quien ha sido acosado por las autoridades recientemente, denunció al régimen castrista, pues opina que las autoridades son las responsables de los ataques en contra de Rosales.

“Quiero denunciar esto porque creo que la vida de él está corriendo peligro en el lugar donde está, y su salud también está corriendo peligro, porque él es un hombre que está padeciendo problemas de enfermedad”, finalizó.

El citado medio de prensa señaló que poco después de su arresto, la esposa del religioso, Maridilegnis Carballo, afirmó que la detención se llevó a cabo de manera violenta, explicando que fue golpeado durante el proceso.