Suplicando por ayuda médica, así falleció en Camagüey un joven con VIH

Enmanuel Lara Marianos, paciente de VIH (Foto: Enmanuel Lara Marianos-Facebook)

Enmanuel Lara Marianos, un cubano de 34 años diagnosticado con VIH, falleció en el Hospital Municipal de Florida, provincia de Camagüey. Antes de su temprana partida, el joven paciente había denunciado en reiteradas ocasiones la desatención e indolencia del personal médico del centro.

“Murió en un hospital pidiendo ayuda médica. Este ser humano tenía 34 años de edad y una vida por delante. Cuidó de su madre hasta el último de sus días y le entregó parte de su juventud a una Revolución que luego le dio la espalda”, denunció en Facebook Yanilys Sariego, amiga de la víctima.

“Era el más grande de todo el grupo, grande de estatura y grande de corazón”, describió la internauta en una publicación que más tarde fue eliminada. “No recuerdo haberlo visto ni una sola vez enfadado, siempre tenía una sonrisa afable en su rostro. ¡Prohibido olvidar! Dejaste morir al más grande de nosotros, al más noble. ¡Díaz Canel, ésta la voy a cobrar a título personal el día que esta dictadura caiga!”.

Me estoy muriendo

Poco antes de su muerte, Marianos había compartido un desgarrador video donde exponía su experiencia como paciente de VIH en el hospital camagüeyano. Al momento de filmar el material, el joven se encontraba afectado por una miocardiopatía dilatada, hepatitis B y C y llevaba casi 24 horas con una severa falta de aire.

“Nadie me atiende. No quieren hacer procedimientos para aliviarme. No hay medicinas, no hay nada. La doctora me deja por loco. La enfermera, la pobre, no sabe qué hacer. Esta es la salud cubana (…) Yo nunca he hecho este tipo de video. Yo no soy contrarrevolucionario. Simplemente soy un paciente al que le están dando palos y no puedo más”.

“Me estoy muriendo”, exclamó.

Tras conocer la lamentable noticia, cientos de amigos y conocidos acudieron a las redes sociales para mostrar su pesar por la partida de Enmanuel. Algunos dijeron sentirse abatidos por no conocer a tiempo la situación del joven.

“¡Qué triste noticia que te dejarán tirado así, que dolor tan grande ver que alguien está a punto de partir y no se hace nada! Hoy no voy a hablar de política porque no cabe, pero ojalá algún día se pague todo el dolor y sufrimiento que vivimos los cubanos, carajo”, escribió su amigo Sánchez Capote.

Cuba, ¿una potencia médica?

Según datos aportados por el Ministerio de Salud Pública (Minsap), al cierre de 2018 unas 25.494 personas vivían con el virus del VIH en Cuba. El 80 % de los diagnosticados son hombres y el resto mujeres, en su gran mayoría entre los 15 y los 49 años.

Al inicio de la epidemia en la Isla, los enfermos eran recluidos en instalaciones alejadas de las ciudades donde se les ofrecía tratamiento y se les prohibía la salida, salvo contadas ocasiones. El objetivo era evitar la propagación de la enfermedad. Hoy en día, presuntamente, el país trata a los pacientes combinando cinco antirretrovirales de producción nacional con otros importados y certificados por la OMS.

Sin embargo, el duro testimonio de Lara Marianos pone en duda este panorama y pone en evidencia el colapso de un sistema sanitario que deja desamparado a sus ciudadanos.