FARÁNDULA
Pintor cubano dibuja a Joaquín Sabina y el retrato llega a manos del cantante español
“Cuando Sabina te dice que tú obra va pa su galería. Un sueño cumplido”, así describió el cubano el encuentro de Joaquín Sabina con su pieza
Joaquín Sabina también tiene una faceta menos conocida como pintor, pues en los últimos años empezó a hacer algunos dibujos, garabatos y caligrafías que él denomina “garagatos”. (Captura de pantalla: Francina Islas Villanueva – Youtube)
El pintor cubano Leandro Sosa Pérez radicado en Madrid retrató en uno de sus cuadros al importante cantautor español Joaquín Sabina, sin imaginar la feliz coincidencia de que la obra pudiera ser vista por el legendario cantante, ni mucho menos formar parte de su colección privada.
“Cuando Sabina te dice que tú obra va pa’ su galería. Un sueño cumplido”, así describió en redes sociales Leo Sosa —como se apoda el dibujante en sus cuentas de artista— el emotivo momento del encuentro de Joaquín Sabina con la pieza.
El video compartido en Facebook y en TikTok muestra al autor de 19 días y 500 noches recibiendo el cuadro y se le escucha decir que este irá para su colección personal, mientras se lo entrega a una de las personas que lo acompañan en la reunión.
La obra muestra a Joaquín Sabina sosteniendo un corazón en sus manos, mientras su torso permanece clavado como una especie de Jesucristo de Nazaret, y por su boca corre abundante sangre que salpica el corazón y las manos.
Esta pieza recuerda por su desgarramiento, composición y elementos simbólicos dentro del cuadro a algunas de las obras de la icónica pintora mexicana Frida Kahlo, de la que el cubano parece haber tenido influencia, como es el caso de Las dos Fridas, un doble autorretrato que representa a la Frida casada y a la Frida soltera conectadas por las arterias de sus dos corazones.
La referencialidad en el cuadro dedicado al cantante español puede encontrarse en algunos versos de sus canciones más conocidas como Noche de Bodas donde dice “que no te vendan amor sin espinas”, o los versos de Dieguitos y Mafaldas “sus huesos son sobrinos de mis huesos; sus lágrimas, los clavos de mi cruz” o el empezar de su última canción Contra todo pronóstico donde comienza cantando: “Sé que respiro porque sigo huyendo de todo el que me exige que muera y resucite”.
Ver esta publicación en Instagram
El caricaturista y dibujante cubano Leandro Sosa, quien se define a sí mismo como un pintor surrealista, estudió en la Academia de Artes Plásticas de Ciego de Ávila, su provincia natal, aunque actualmente reside en Las Palmas de Gran Canaria, lo que facilitó el acceso al músico español.
A raíz de esta noticia compartida en sus redes, el cubano ha recibido muchísimos halagos y mensajes de felicitación de sus seguidores y amigos por haber llegado con su obra al mismísimo Joaquín Sabina y obtener esa cálida respuesta de parte del cantautor.
“De lo más grande que me ha pasado, de las únicas cosas que siempre soñé” y “todavía no me lo creo”, fueron algunas de las expresiones de Leo Sosa en las redes, en respuesta a comentarios como el de Ayleni Rodríguez que escribió: “Me imagino el placer de haber conocido al maestro. Son logros que reconfortan, y que mereces por el talento que tienes. Es solo el comienzo de grandes cosas”.
El popular cantautor Joaquín Sabina también tiene una faceta menos conocida como pintor, pues en los últimos años, obligado a hacer reposo de voz entre concierto y concierto, empezó a hacer algunos dibujos, garabatos y caligrafías que él denomina “garagatos” hasta llenar 50 cuadernos con más de 2 mil dibujos.
Inspirados en su padre, su madre, por cosas de la vida, por sus gatos, por Matisse, por Picasso, Van Gogh, según confesó el propio Joaquín, en 2016 se presentaron dos tomos con 66 dibujos con la firma de Sabina, diseñados en un estuche de madera que simula una puerta de su casa en la que se han reproducido los dibujos que puso en ella.
Después de eso, en 2019 el español presentó también una exposición titulada Aves de paso, que reunió otros 250 dibujos originales del cantante nunca antes mostrados. En esa ocasión confesó: “Hace muchos meses que no escribo un solo verso de canción, pero todos los días hago cinco o seis dibujos”.
