Problemas en la bioeléctrica de Ciego de Ávila paralizan la producción de energía

Hay problemas técnicos que necesitan de ajustes y nuevas inversiones en el diseño de alimentación de la caldera de la bioeléctrica para que el bagazo se queme al 100%. (Foto: Invasor)

La publicitada bioeléctrica ubicada en aéreas aledañas al central Ciro Redondo de Ciego de Ávila, única de su tipo en el país y surgida gracias a la empresa mixta Biopower S.A., tiene problemas de operación y no ha podido producir energía por la quema de bagazo, un desecho de la zafra azucarera.

De acuerdo con el diario local Invasor, la sincronización de la planta al Sistema Electroenérgetico Nacional (SEN) duró un “santiamén” y preocupa que en plena zafra la bioeléctrica de 330 millones de pesos en inversión no pueda cumplir los objetivos para lo cual fue diseñada.

Carmen Taboada Hernández, vicepresidenta de Biopower S.A., indicó que hay problemas técnicos que necesitan de ajustes y nuevas inversiones en el diseño de alimentación de la caldera de la bioeléctrica para que el bagazo se queme al 100%, tal como sucede con el marabú.

Resulta inconcebible que los problemas que se están presentando no hayan sido previstos en la etapa de diseño. Según Taboada Hernández “las diferencias entre la granulometría de ambas biomasas (marabú y bagazo) generan problemas, tanto que en materia técnica lo que es bueno para una es malo para la otra. Tampoco llega de manera uniforme el bagazo a la tolva de recepción y estos vacíos provocan altibajos de presión, con un riesgo importante de explosión”.

Ahora las autoridades esperan por los especialistas chinos para poner en marcha las modificaciones. Sobre ello habló el vice primer ministro cubano Jorge Luis Tapia Fonseca que en días recientes visitó la planta.

Como solución momentánea indicó que para finales de febrero hay que “contar con ocho cosechadoras que pueden aportarnos 480 toneladas diarias de marabú. Aunque esto no cubre la demanda de la planta, que necesita de 1 200 a 1 500 toneladas de esta biomasa en 24 horas”.

“Hay que ajustar el mecanismo y quemar bagazo al ciento por ciento. No puede haber más dilataciones”, precisó.

En el chequeo de los problemas también se evidenció que no se ha cumplido con la siembra de biomasa para suplir dentro de unos años al marabú que eventualmente se acabaría.

De 3.724 hectáreas previstas para la siembra a bosques energéticos solo 307 se han plantado; mientras que la Empresa Agroforestal no dispone aún de los viveros tecnificados para cumplir con la tarea de germinación de las semillas.

El propio diario oficialista señala “errores en los estudios de factibilidad que debieron anteceder a la cuantiosa inversión”.

Por ejemplo, Julio García Pérez, presidente del grupo empresarial AZCUBA, reconoció que hubo errores en el diseño. “Cuando el central muele a una capacidad entre el 55 y el 60% se dispara la corriente. La fábrica consume más energía que la prevista en el diseño original, sobre todo, en los picos que se generan durante la molienda”.

Además, acotó fallas en la disponibilidad de agua: “la fábrica estuvo parada durante 20 horas por eso”.