ESTADOS UNIDOS
Proyecto de ley en Texas criminaliza a los migrantes que crucen la frontera
La normativa daría mayores facultades a las fuerzas del orden estatales para combatir el nuevo delito
El Congreso estatal de Texas, de mayoría republicana, impulsa un proyecto de ley con la anuencia del gobernador Greg Abbott para criminalizar a los migrantes que crucen la frontera de Estados Unidos, y darle mayores facultades a las fuerzas del orden para que combatan el nuevo delito.
La ley permite a la policía local detener a personas para verificar su estatus legal en EEUU, una medida que, según el representante estatal de Texas, Armando Valle, “afectará desproporcionadamente a los hispanos y a aquellos con apariencia latinoamericana”.
En entrevista con la cadena de noticias CNN en Español, Valle, quien es también abogado, destacó la inconstitucionalidad del proyecto de ley que se quiere aprobar lo antes posible. El argumento del letrado consiste en que la inmigración en toda la frontera sur de EEUU es una competencia del gobierno federal y no un asunto estatal. En ese sentido, resaltó que ya existen leyes federales para tratar la inmigración ilegal.
Ese mismo temor ha sido difundido entre todos los extranjeros que viven en Texas y no solo a los que residen en los condados fronterizos. Texas es el segundo estado más poblado de EEUU, solo por detrás de California, y tiene una significativa proporción de hispanohablantes.
Según Valle, la ley podría empeorar la ya tensa relación entre la comunidad hispana y la policía en Texas, un estado con un historial de problemas raciales. El representante expresó su temor por la seguridad y el bienestar de su comunidad ante esta nueva legislación.
A pesar de su respeto por la labor policial, Valle señaló que la ley podría ser mal utilizada, poniendo a muchas personas en situaciones vulnerables. Esta preocupación se extiende a aquellos que, aun con documentos legales, podrían ser detenidos injustamente.
El representante destacó que la nueva ley es parte de una agenda política más amplia, controlada por un sector derechista y antimigrante del partido republicano. Asimismo, hizo un llamado a la acción, instando a la comunidad a involucrarse y votar para apoyar legislaciones que representen sus intereses.
El límite entre Texas y México se extiende aproximadamente 1.254 millas (2.018 kilómetros), marcando una de las fronteras internacionales más largas entre un estado de EEUU y México. A lo largo de la historia, esta línea divisoria ha sido un punto focal para la migración, caracterizada por flujos variables de extranjeros, buscando oportunidades, refugio o reunificación familiar.
Desde el siglo XIX, cuando Texas se convirtió en parte de EEUU, hasta la actualidad, la dinámica fronteriza ha evolucionado, influenciada por factores económicos, políticos y sociales. La migración ha tenido sus picos, especialmente durante períodos de inestabilidad en América Latina o cambios en las políticas migratorias de EEUU.