FARÁNDULA
“¡Qué rico pan!”: Influencer Yoandi Montiel muestra las proporciones de un pan de la bodega
El pan de la bodega ha sido protagonista de múltiples controversias y debates

El influencer estuvo preso dos años por burlarse del dictador Miguel Díaz-Canel. (Captura de pantalla © Yoandi Montiel Hernández – Facebook)
El influencer y opositor cubano Yoandi Montiel Hernández, conocido como El Gato de Cuba, compartió en Facebook una fotografía de un pan de la bodega en Cuba, resaltando su tamaño reducido y baja calidad. La imagen generó diversas reacciones entre los usuarios, quienes expresaron su inconformidad con la situación del pan en la isla.
“Todo el mundo tiene pan, pero en Cuba no hay pan para comer”, comentó un internauta, mientras que otro relató su experiencia al criticar la escasez en una cafetería estatal, lo que le costó una multa y tres días de detención. Otros usuarios lamentaron las dificultades que enfrentan los niños para obtener su desayuno y merienda escolar.
El desabastecimiento del pan de la bodega no es un problema nuevo. Desde el 7 de febrero, la provincia de Villa Clara ha enfrentado una crisis por la falta de harina de trigo, lo que ha afectado la producción de este alimento básico. Odel Dueñas, director de la Empresa Productora de Alimentos del territorio, informó que las reservas de harina están agotadas, lo que ha impedido la elaboración del pan normado con regularidad.
La situación se tornó más crítica en los primeros días del mes, cuando la provincia atravesó períodos de hasta cinco días sin materia prima para producir pan. Ante la escasez, las autoridades implementaron medidas de racionalización, priorizando el suministro a instituciones sociales y a niños de cero a tres años.
El abastecimiento se reanudó el 7 de febrero, pero con limitaciones, ya que depende de la producción diaria del molino de Cienfuegos. La harina que se muele se distribuye inmediatamente, lo que significa que cualquier interrupción en la producción impacta de inmediato en el suministro de pan en la provincia. Ante esta situación, la entrega del producto ha sido irregular y muchos consumidores han quedado sin recibirlo.
A esta problemática se suman los apagones en la provincia, que han dificultado aún más la elaboración del pan. Municipios han reportado cortes eléctricos de hasta 20 horas, lo que impide completar el proceso de producción en los horarios establecidos. Según Dueñas, cuando hay harina no hay electricidad, y cuando la corriente regresa, falta la materia prima.
Para paliar la crisis, se han activado hornos de leña y de “juje”, con el objetivo de mantener la elaboración de pan de forma artesanal. Sin embargo, la población de Villa Clara sigue preocupada por la incertidumbre diaria sobre la disponibilidad del producto en las bodegas.
Este problema no se limita a Villa Clara. Otras provincias también han reportado dificultades en la distribución de harina y producción de pan, evidenciando una crisis generalizada en el sector alimentario. La falta de reservas y la dependencia de un solo molino reflejan la vulnerabilidad del sistema de abastecimiento en Cuba, lo que ha generado descontento en la población ante la incapacidad del gobierno para garantizar productos básicos.
