Sustituyen a Consuelo Baesa como presidenta de la Comisión Nacional de Candidatura

Antes de llegar a ese cargo nacional, Beasa Martín había sido la secretaria de la CTC en Villa Clara. (Captura de pantalla © Canal Caribe – YouTube)

El régimen cubano sustituyó a Consuelo Baesa Martín, quien se desempeñaba como presidenta de la Comisión Nacional de Candidatura en el Consejo Electoral Nacional. El sorpresivo cambio en esa estructura fue informado en una nota oficial donde se designa a Geovanis Ávila Góngora para el cargo.

La Comisión Nacional de Candidatura es el instrumento creado por el Partido Comunista de Cuba (PCC) para organizar los procesos electorales y simular comicios democráticos. El dirigente del organismo tiene la responsabilidad de filtrar precandidatos a los parlamentos municipales y a la Asamblea Nacional, así como la nominación y elección de sus principales oficiales.

Se integran por representantes de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) y de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media, designados por las direcciones nacionales, provinciales y municipales respectivas. Con ello, se asegura la fidelidad total al PCC de los que acceden a cargos legislativos y, en consecuencia, se suceden los votos unánimes en las asambleas municipal y nacional.

En la ceremonia de cambio de liderazgo estuvo presente Alina Balseiro Gutiérrez, presidenta del Consejo Electoral Nacional, marcando un momento crucial en el proceso electoral cubano.

“Podemos decir que fue muy importante el papel de la comisión de candidaturas, presidido por la compañera Consuelo, y que incidió realmente en los resultados de los procesos electorales que acabamos de desarrollar, los referendos populares por el nuevo Código de las Familias, los comicios generales de marzo del pasado año y las elecciones de gobernadores y vicegobernadores efectuadas en mayo”, explicó Balseiro Gutiérrez.

Durante el acto, Geovanis Ávila Góngora se comprometió solemnemente a “respetar la Constitución y las leyes electorales, reafirmando el compromiso de la Comisión con la transparencia y la democracia”.

El sistema electoral cubano, caracterizado por la presencia de un único partido político, muestra limitaciones significativas en comparación con los estándares democráticos. La ausencia de competencia electoral, debido a la prohibición de múltiples partidos políticos y la restricción en la realización de campañas, reduce la diversidad de opciones para los votantes, que en la realidad viven bajo una dictadura.

Además, la selección de candidatos para cargos más altos está fuertemente controlada por Comisiones de Candidaturas vinculadas al PCC, limitando la representación de voces independientes o de oposición en el proceso político. Que alguien con pensamiento propio logre pasar todos los filtros para ser parlamentario es prácticamente imposible.

En ese sentido, la limitada libertad de expresión y asociación en Cuba restringe la formación y el desarrollo de alternativas políticas, afectando la pluralidad y la participación ciudadana en la toma de decisiones.