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Taekwondoca cubana recibe como premio tomates y cebollas en Guantánamo
Las autoridades presumen el premio, mientras en redes sociales lo califican como indignante
La entrega de cinco tomates y dos cebollas como premio a una joven practicante de taekwondo en Guantánamo, por parte del gobierno cubano, ha desatado críticas y controversias en las redes sociales.
La situación, considerada por muchos como surrealista, generó un debate sobre la precaria situación económica en la Isla y las formas de reconocimiento por parte de las autoridades.
Pese a ser un indignante acto, los funcionarios lo dieron a conocer con bastante entusiasmo. “Esto es la revolución”, dijo Girmanis López Rojas, trabajadora del Instituto de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder) en la región.
La entrega de los productos, cosechados por la agrupación campesina ‘Pepe Gardín’, estuvo a cargo de Emidel Legrá Matos, metodólogo de Alto Rendimiento en el municipio Niceto Pérez, quien también se tomó algunas fotos con la joven “reconocida”.
Las reacciones negativas en las redes sociales sobre este hecho no se hicieron esperar. “Esto ya es surreal: con los contenedores de mercancía y comida de todo tipo que importa el Comité Central de la zona franca de Panamá, aunque sea le hubieran dado alguna baratija china”, argumentó un usuario.
Otro internauta llamado Alberto Hernández comentó: “Esto es una señal de hambre, fracaso y miseria que ha creado ese régimen para mantenerlos aun diciendo gracias ante tan vergonzoso premio”.
La internauta Mercedes Rodríguez escribió: “Qué vergüenza, no les basta con todos los dólares durante años ganados por todos ellos y por médicos, para luego entregarles migajas cada mes. Ahora les dan, lo más bochornos, eso es humillante, señores”.
La entrega de premios de este tipo no es un caso aislado en territorio insular. En años anteriores, deportistas de alto rendimiento y trabajadores recibieron regalos similares como forma de reconocimiento por sus logros. Desde un boxeador olímpico hasta un joven pelotero, varios casos han sido expuestos donde se premia con alimentos a quienes destacan en sus disciplinas.
En 2021, el boxeador cubano Julio César La Cruz recibió un pescado, dos botellas de refresco, una botella de ron y otros regalos tras su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio. Otro ejemplo es el pugilista Ronny Álvarez, quien fue premiado con un combo de alimentos y aseo luego de obtener una medalla de oro en un evento clasificatorio al Panamericano juvenil.
Estos “reconocimientos” solo generan críticas tanto dentro como fuera de Cuba. Muchos consideran vergonzoso que los deportistas sean premiados con alimentos básicos en lugar de recibir un reconocimiento más significativo por sus esfuerzos y logros.