El príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa Camilla, duquesa de Cornwall, llegaron el pasado domingo a La Habana, en lo que constituye la primera visita oficial que realizan miembros de la corona británica a la isla.

La visita no ha estado exenta de controversia debido al régimen comunista imperante en la nación caribeña. Este hecho histórico habría sido impensable hace años, antes de que Barack Obama, expresidente de EEUU, y Raúl Castro, expresidente de Cuba, descongelaran más de medio siglo de tensas relaciones entre los vecinos de América del Norte y sus aliados.

Sin embargo muchos de los avances han sido congelados desde la llegada de Donald Trump al poder. En este contexto de hostilidad estadounidense, el príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles pasarán cuatro días en Cuba destacando “la creciente relación bilateral con el Reino Unido y mostrando algunos de los vínculos culturales entre los dos países”, según un portavoz real.

La prensa del Reino Unido se hace eco hoy de este suceso. Por ejemplo, la BBC de Londres dice: “el viaje del príncipe de Gales y de la duquesa de Cornualles ayudará a abrir un nuevo capítulo en las relaciones entre ambos países”.

The Telegraph, también publica imágenes de los príncipes rindiendo homenaje al héroe nacional cubano José Martí y aclara que el matrimonio acostumbra a conversar con representantes de la sociedad civil de los países que visita, y en el caso de Cuba desean conocer más sobre el debate ciudadano en redes sociales dentro de la isla, que recientemente activó el servicio de internet móvil.

Para el diario español “El Periódico”, la visita “refleja el buen estado de la relación entre el Reino Unido y Cuba con el fin de estimular aún más el desarrollo de los vínculos, un compromiso que no significa que los dos países concuerden en todos los ámbitos, sino que ven oportunidades para el intercambio”.

Sin embargo, otros analistas opinan que el gobierno británico tiene otros temas mucho más importantes que atender como lo es el Brexit y que Cuba es lo último de su agenda.

En cambio, hay otros que asocian la visita a la isla como parte de una gira internacional de la pareja real y le restan importancia. Piensan que el verdadero significado del viaje del Príncipe Carlos y si esposa, es promocionarlos como los eminentes herederos a la corona británica ya que la reina Isabel II tiene una edad avanzada y su reinado lleva más de 60 años.

Con información de CubaSi