Preso político Sosa Fortuny regresa a la cárcel, pero su salud sigue siendo delicada

El preso político cubano Armando Sosa Fortuny ha sido devuelto a la cárcel “La Empresita” de Camagüey el  martes, luego de que las autoridades lo trasladaran de emergencia al Hospital Amalia Simoni, donde permaneció durante tres días.

Graciela Suárez, responsable de su cuidado y atención, dijo a Radio Televisión Martí que la salud de Sosa presentó evidente mejoría durante su estancia en el hospital. Sin embargo, considera que a pesar de haber recibido el alta su condición continúa siendo delicada.

Durante el pasado fin de semana, el reo de 76 años fue trasladado de urgencia al centro hospitalario por presentar vómitos. En la tarde del sábado, una de las enfermeras informó a Suárez que la situación era un poco más complicada porque este padecía de “una bronconeumonía y que estaba muy grave”.

A pesar de la información proporcionada por la enfermera, uno de los médicos tratantes aseguró que el problema de salud de Sosa estaba relacionado a una alteración en sus niveles de azúcar, causados por su condición de diabético y su negativa a recibir los alimentos que le ofrecían en la cárcel.

Una vez que los niveles de azúcar en la sangre pudieron ser estabilizados, los médicos determinaron el regreso de Sosa a la cárcel de La Empresita, decisión que Graciela Suárez refuta debido a que el paciente ahora mismo “no pesa ni 90 libras”.

Armando Sosa Fortuny, con graves dolencias y diabético, ha pasado los últimos 26 años de vida cumpliendo la condena de 30 años de cárcel que le fue impuesta por el régimen, que lo acusó de “infiltración, entrada ilegal a Cuba y otros actos contra la Seguridad del Estado”.