Prensa castrista quita responsabilidad al Gobierno y culpa al pueblo por rebrotes

Prensa castrista le quita responsabilidad al Gobierno y culpa al pueblo por rebrote. (Foto ilustrativa: Vicente Brito-Escambray)

La prensa oficialista de Cuba sigue responsabilizando únicamente a la población por el rebrote de coronavirus en el país, eximiendo de responsabilidad a las autoridades.

Aunque la mayoría de los contagios detectados se han dado en centros de trabajo del Estado y, a pesar de que el mayor riesgo sigue viniendo de las aglomeraciones en colas para comprar alimentos, el Gobierno señala a la población como “descuidada” e “irresponsable”.

Frases como “la zancadilla nos la hemos puesto nosotros mismos”, “lo cierto es que las culpas pesan casi siempre en la irresponsabilidad ciudadana” o “a las personas, como dice el refrán, se les ha dado un dedo y se han cogido la mano entera”, resaltan a lo largo de la nota del medio oficialista Escambray.

Además de culpar a la ciudadanía, esta última frase alude a un panorama en el que el gobierno ha hecho algo por ayudar a sus ciudadanos, cuando lo cierto es que solo se ha complicado su ya precaria situación.

En La Habana, por ejemplo, quienes tienen los recursos para acudir a las tiendas en dólares pueden hacerlo con normalidad, mientras que el 90% restante debe sujetarse a un estricto horario que solo alarga más las colas pues todos quieren alcanzar lugar dentro del horario señalado.

Asimismo, pueden comprar solo lo que esté disponible en sus municipios, cuando es bien conocido que para los cubanos es necesario visitar hasta tres tiendas diferentes para conseguir lo que necesitan pues todas se encuentran desabastecidas de lo necesario.

Por otro lado, aunque se han reforzado medidas como las restricciones de movilidad entre municipios y provincias, lo cierto es que no se ha hecho nada para resolver las aglomeraciones en el transporte público o en las colas para comprar alimentos y otros productos.

Tampoco se ha resuelto la escasez de productos de limpieza, dejando a la población sin cloro, hipoclorito, cualquier desinfectante o siquiera jabón de manos en medio de una pandemia que se combate principalmente con higiene.

Eso sin mencionar la gran parte del territorio que se encuentra sin agua potable o cuyo servicio es deficiente, por lo que lavarse las manos todas las veces requeridas es prácticamente imposible.

Ignorando todo esto, así como el hecho de que gran parte de los contagios fueron fuerzas médicas cubanas en Venezuela que pasaron los supuestos filtros estrictos en el aeropuerto sin ser detectados, se sigue responsabilizando enteramente a los cubanos por la incidencia de COVID-19 en la Isla.

Asimismo, no se mencionan las licencias que han dado las autoridades al reabrir los espacios públicos como playas, heladerías y parques, o al autorizar eventos como la conga en Granma.

El régimen olvida que pasó dos meses repitiéndole a la población que la pandemia estaba “controlada” y hasta “vencida” en el territorio, jactándose de sus medidas y su deficiente sistema de salud, creando una falsa sensación de seguridad entre sus habitantes a los que ahora culpa de aprovechar las pocas libertades que se les han otorgado.