Acusan de desorden público a la periodista que transmitió la manifestación en La Habana

Acusan de desorden público a la periodista que transmitió la manifestación a favor de Otero Alcántara. (Collage: Angel Tur-Facebook y Mary Karla-Facebook)

Mary Karla Ares, periodista del Instituto Cubano para la Libertad de Expresión (ICLEP), fue una de las personas arrestadas el pasado viernes durante una manifestación pacífica a favor de Luis Manuel Otero Alcántara en La Habana, y actualmente está siendo acusada de “desorden público”.

A través de redes sociales se advirtió de la situación por la cual atraviesa la reportera, quien el pasado viernes se encontraba transmitiendo en vivo las detenciones que se estaban llevando a cabo en la calle Obispo, en frente de la vivienda del artista independiente.

“Alerta, alerta, alerta. Instruyen por un supuesto delito de desorden público a la periodista del ICLEP Mary Karla por haber reportado en directo los acontecimientos del pasado viernes cuando docenas de personas fueron reprimidas por fuerzas combinadas de la PNR y la Policía Política, por intentar llegar a la sede del MSI. La reportera se encuentra arrestada desde entonces”, advierte una de las denuncias hecha en línea.

Varios de los comentarios en la publicación exigen a las autoridades cubanas que liberen a la periodista, cuyo único “crimen” fue el de mantener a los ciudadanos informados sobre lo que ocurría en La Habana.

De acuerdo con el periodista independiente Héctor Luis Valdés Cocho, Mary Karla Ares fue detenida el pasado viernes junto a los activistas Thais Mailén Franco y Esteban Rodríguez

El pasado sábado Cocho exigió en sus redes sociales información sobre Esteban Rodríguez, quien todavía continúa desaparecido

“Den fe de vida de Luisma y liberen a Esteban Rodríguez y a los demás chicos que protestaron pacíficamente. Me basto y me sobro para virar la mie**a esta boca arriba”, se lee en el mensaje del periodista.

El incidente en el que decenas de artistas y activistas fueron arrestados ocurrió el pasado viernes, cuando un gran número de personas se reunió en frente de la vivienda de Otero Alcántara para exigir a las autoridades castristas que los dejaran ver al artista, pues desde hacía días el Gobierno colocó un cerco policial en los alrededores para evitar el paso de la gente.