Arrojan barro al presidente y al rey de España en Valencia

El rey de España, Felipe VI, y el presidente de esta nación, Pedro Sánchez, visitaron la zona afectada por la DANA tras seis días de este fenómeno meteorológico. (Captura de pantalla © La Vanguardia – YouTube)

El presidente de España, Pedro Sánchez; y el rey Felipe VI recibieron abucheos, insultos y hasta lanzamientos de barro cuando visitaban la zona afectada por una catastrófica inundación en Valencia, que ocasionó una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), también conocida como “gota fría”.

Las fuertes lluvias e inundaciones de ese fenómeno meteorológico dejaron a más de 200 personas fallecidas y decenas de desaparecidos, mientras miles de familias luchan con las secuelas del desastre.

Los dos líderes, acompañados por la reina Letizia y el presidente regional, Carlos Mazón, recorrieron este domingo el terreno devastado, donde el agua y el barro han dejado un panorama de destrucción.

Sin embargo, su presencia, tras seis días de la tragedia, generó una reacción de furia entre los habitantes, quienes, desesperados y con profundo malestar, arrojaron barro y otros objetos a la comitiva al grito de “¡asesinos!” y “¡dimisión!”.

La llegada de las autoridades, en medio de un clima de enojo generalizado, reflejó la indignación de quienes acusan a las administraciones de una lenta y deficiente respuesta. Entre los reclamos más repetidos destacan la demora en la movilización de servicios de emergencia, así como la tardanza en desplegar al ejército y la policía en las áreas más afectadas.

Además, se criticó la falta de alerta oportuna a la población, a pesar de que la Agencia Estatal de Meteorología había activado el máximo nivel de alerta por la DANA el martes 29 en la mañana.

“Se sabía y nadie hizo nada por evitarlo”, dijo un joven al Rey durante su visita en Paiporta. En medio del caos, el monarca insistió en dialogar con los afectados, y en un momento fue visto consolando a un hombre que lloraba por lo sufrido y la falta de apoyo.

En redes sociales también circula el momento en que Sánchez tuvo que ser evacuado de inmediato por su equipo de seguridad. Decenas de personas comenzaron a golpear su vehículo, exigiéndole una atención más seria ante la devastación.

Las quejas no se limitan a la administración local. Desde Madrid, el gobierno central enfrenta cuestionamientos por no haber actuado con rapidez y por rechazar una oferta de Francia para enviar 200 bomberos especializados en rescate.

La protección civil emitió una alerta en los teléfonos de los habitantes de Valencia y sus alrededores después de las 8:00 p.m. del martes, cuando muchas áreas ya estaban inundadas, lo cual intensificó la frustración de los ciudadanos.

En su defensa, Carlos Mazón, del Partido Popular, quien también estuvo en la visita, reconoció el malestar y destacó la importancia de escuchar la indignación. “Entiendo la indignación social y por supuesto me quedo a recibirla. Es mi obligación política y moral. La actitud del Rey esta mañana ha sido ejemplar”, expresó Mazón en la red social X.

La magnitud de la catástrofe sigue aumentando: más de 3.000 hogares continúan sin electricidad y la infraestructura de la región ha sufrido daños significativos. La tragedia ya se considera la peor en Europa por inundaciones en un solo país desde 1967, cuando unas 500 personas murieron en Portugal.